Marta, una joven de 29 años de Badajoz, ha compartido su desgarrador testimonio sobre una adicción que nunca imaginó que podría desarrollar: su dependencia de los espráis descongestionantes nasales, que comenzó cuando tenía solo 12 años debido a una rinitis alérgica provocada por el hongo Alternaria.

A pesar de que estos espráis, los cuales contienen oximetazolina, son efectivos para aliviar la congestión nasal, su uso está altamente regulado. La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) advierte que no deben ser utilizados por más de tres días, ya que esto puede provocar congestión nasal de rebote, es decir, la condición puede empeorar al dejar de usarlos.

"Nunca pensé que algo tan simple se convertiría en algo tan dañino", relata Marta. Su historia es un reflejo de muchas personas que, al buscar alivio temporal, terminan atrapadas en un ciclo de dependencia. Relata que tenía espráis esparcidos por toda su casa, en cada bolso, siempre en busca de ese alivio inmediato. Lamentablemente, este alivio venía acompañado de efectos adversos, como picor en la nariz y dolor de cabeza intenso.

Su lucha con esta dependencia alcanzó su punto culminante cuando a los 22 años, un médico le advirtió sobre los riesgos graves asociados a su uso prolongado, incluyendo la posibilidad de un ictus. Asustada y consciente de los efectos en su salud, decidió deshacerse de todos los botes. Sin embargo, la recuperación no fue fácil; pasó más de un mes con problemas para dormir y tuvo que recibir tratamientos alternativos como baños de vapor y corticoides para ayudarle a respirar.

Afortunadamente, después de siete años sin utilizar espráis nasales, Marta ahora solo experimenta episodios esporádicos de congestión, pero ha aprendido a manejar su condición sin caer en la trampa de la adicción nuevamente. Ella aconseja a quienes se encuentren en una situación similar que busquen alternativas más seguras, como las soluciones de agua de mar, que carecen de los efectos secundarios dañinos de los descongestionantes tradicionales.

La farmacéutica María José Divins Triviño señala que el uso inadecuado de espráis nasales puede traer consigo una serie de problemas, desde nerviosismo hasta alteraciones graves en el estado de la mucosa nasal, lo que podría conducir a daños persistentes.

La historia de Marta es un poderoso recordatorio de la importancia de ser consciente del uso de medicamentos comunes y de buscar apoyo cuando se siente atrapado por una adicción silenciosa. La lucha por la salud continúa, pero tomar decisiones informadas puede marcar la diferencia.