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¡Increíble hallazgo en Francia! La 'Lechuza de Oro' desenterrada tras 31 años de enigmas

2024-10-03

En un sorprendente giro de los acontecimientos, una réplica de la 'Lechuza de Oro', una escultura de 10 kilos de oro y plata incrustada con diamantes, ha sido desenterrada en un secreto rincón de Francia. Esta obra maestra, enterrada en 1993, solo podía ser localizada al resolver once acertijos planteados en el libro 'En busca de la Lechuza de Oro'. Sin embargo, la identidad del descubridor aún sigue siendo un misterio.

La historia comienza en abril de 1993, cuando el enigmático escritor Regis Hauser, conocido bajo el seudónimo de Max Valentin, ideó esta búsqueda masiva para mantener un bajo perfil. Preocupado por su privacidad, rara vez se mostraba en público y se cubría el rostro, todo esto hasta su fallecimiento en 2009.

La escultura original, diseñada por Becker, tiene un impresionante valor estimado en 150,000 euros. Según las reglas del juego, quien encontrara la réplica podría canjearla por la pieza auténtica y obtenerla como un fabuloso premio.

Sin embargo, el camino hacia el hallazgo no ha sido fácil. A lo largo de estos 31 años, miles de entusiastas han intentando, sin éxito, descubrir el escondite de la 'Lechuza'. Por si fuera poco, los creadores de este célebre acertijo han enfrentado diversas complicaciones legales, lo que ha añadido un giro aún más dramático al relato.

En el transcurso de los años, la Lechuza original fue incautada por un liquidador judicial tras la bancarrota de la editorial encargada de la tercera edición del libro. Después de cuatro años de intensas peleas legales, Hauser y Becker lograron recuperar la famosa estatua en 2009, el mismo año en que Hauser falleció.

Más adelante, Becker se vio inmerso en un conflicto con los herederos de Hauser, buscando recuperar el control sobre las soluciones de los acertijos, que estaban depositadas en un notario de París. Afortunadamente, en 2021, la familia de Hauser permitió que Becker accediera a estos secretos, guardados en un antiguo disquete informático.

A pesar de los conflictos, Becker hizo un intento de subastar la estatuilla original en 2014, pero canceló la subasta ante la indignación de la comunidad de cazadores de tesoros, que deseaba que el desafío continuara para que más personas pudieran participar.

Este suceso no solo revive la emoción de la búsqueda, sino que ha capturado la atención de los medios y continúa fascinando a los amantes de las aventuras y los misterios. ¡La búsqueda por la Lechuza de Oro sigue viva!