El Gobierno de la Comunidad de Madrid, liderado por Isabel Díaz Ayuso, ha lanzado una propuesta sorprendente: adelantar las comidas en los restaurantes para adaptarse mejor a las necesidades de los turistas. Miguel Ángel García Martín, portavoz del Ejecutivo regional, afirmó que es fundamental ‘dar libertad a los comerciantes, incluyendo la hostelería, para que puedan ajustar sus horarios a las demandas de los visitantes’.

Ayer, durante una presentación relacionada con el próximo reconocimiento de Madrid como Capital Europea de la Cultura Gastronómica 2024/2025, Ayuso destacó la importancia de entender las costumbres de los turistas. Según sus palabras, muchos españoles que viajan al extranjero suelen tener dificultades para adaptarse a los horarios de comida y cena de otros países. ‘Tenemos la obligación de adaptarnos a quienes vienen a disfrutar de nuestra ciudad’, afirmó con entusiasmo.

Además, según fuentes del Gobierno autonómico, se está trabajando en fomentar la libertad de horarios para que los restaurantes en áreas turísticas puedan abrir en momentos más convenientes para los visitantes internacionales, que suelen comer entre las 12 y 13 horas y cenar entre las 18 y 19 horas. ‘No se trata de imponer horarios, sino de facilitar que cada establecimiento pueda alinearse con las tradiciones de los turistas’, enfatizaron.

Sin embargo, esta iniciativa ha sido recibida con críticas por parte de movimientos vecinales que rechazan la masificación del turismo, ya que temen que esto pueda llevar a un aumento en los precios de la vivienda. De hecho, se ha convocado una manifestación el próximo 13 de octubre en contra de las ‘insostenibles’ subidas de los alquileres que han afectado a muchos residentes.

Por si fuera poco, en medio de estos cambios propuestos, el Gobierno de Ayuso ha urgido al Gobierno central a aclarar si se extenderá la ayuda actual al transporte público, que incluye la gratuidad en los abonos de Cercanías y Media Distancia. ‘Estamos en octubre y aún no tenemos noticias sobre la continuidad de estas medidas’, lamentó García Martín, quien expresó la necesidad de una solución rápida para mantener el apoyo económico a los usuarios del transporte público en la región.

Con esta propuesta valiente, ¿será Madrid capaz de atraer a más turistas mientras se enfrenta a las críticas de sus propios ciudadanos? ¡La respuesta está en el aire!