El Celta de Vigo hizo historia al conseguir una victoria épica en Gran Canaria, derrotando a la UD Las Palmas 0-1, a pesar de que jugó 40 minutos con solo nueve futbolistas. El gol del triunfo llegó de la mano de Borja Iglesias, quien anotó al filo de la media hora tras un centro magistral de Óscar Mingueza. Esta victoria marca la primera vez que el Celta mantiene su portería a cero, gracias a la increíble actuación del portero Vicente Guaita, que hizo varias paradas espectaculares, manteniendo su arco imbatido ante los embates del equipo local.

El principal protagonista del duelo no fue solo el equipo, sino el árbitro Cordero Vega, que, de manera surrealista, dejó al Celta con dos jugadores menos en un lapso de dos minutos. Las tarjetas amarillas a Ilaix Moriba y a Iago Aspas, ambas controversiales, desataron la furia de los hinchas celestes, que vieron cómo su equipo se reducía a una situación crítica. Con la presión de jugar en inferioridad numérica, el Celta se replegó, mostrando una solidez defensiva admirable.

A pesar de las adversidades, el Celta se adaptó rápidamente a las condiciones del partido y comenzó dominando el balón. Los volantes, especialmente el internacional minguecista, desbordaron por las bandas, generando numerosas ocasiones de ataque. La primera oportunidad clara fue un remate al palo de Borja Iglesias, seguido de un disparo de Willito Swedberg que fue anulado por el VAR por un milimétrico fuera de juego.

Con la ventaja en el marcador, el Celta retrocedió, permitiendo que Las Palmas tomara la iniciativa. Sin embargo, los insulares carecieron de claridad en la finalización, con Fabio Silva poniendo en aprietos a Guaita sin poder concretar las oportunidades. A pesar de los intentos desesperados de los locales, el Celta demostró que, incluso en inferioridad, se puede defender con eficacia.

El entrenador Claudio Giráldez, tras el partido, destacó la fortaleza mental de su equipo: "Salimos reforzados. Nos vamos al parón con un chute de energía". Una afirmación segura, considerando la valentía mostrada por sus jugadores en un partido donde muchos podrían haber se rendido.

Con este resultado, el Celta se posiciona de manera óptima en la tabla y deja claro que tienen la capacidad de superar adversidades. Ahora, con una confianza renovada, el equipo buscará mantener este impulso en su próximo encuentro, haciendo soñar a sus aficionados con grandes cosas en esta temporada. ¡El Celta ha demostrado que con corazón y estrategia, nada es imposible!