El café no solo es una bebida revitalizante, sino que también podría tener efectos sorprendentes en la salud cerebral. Varios estudios han ligado el consumo regular de café y chocolate con una disminución de las tasas de Alzheimer. Recientemente, un grupo de investigadores en salud pública de la Universidad Médica de Ningxia, en China, ha presentado hallazgos innovadores que sugieren que los bebedores habituales de café con hipertensión arterial podrían tener un menor riesgo de desarrollar demencia en comparación con aquellos que no consumen café, según un estudio publicado en Scientific Reports.

Investigaciones anteriores ya han mostrado que el consumo moderado de café o té puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud de la barrera hematoencefálica, componentes esenciales que se han asociado con un menor riesgo de demencia.

El equipo de investigadores, liderado por Xian Sun, se propuso determinar la relación entre el consumo de bebidas con cafeína y el desarrollo de demencia. Para ello, analizaron datos de salud recopilados del Biobanco del Reino Unido, que incluye más de 500.000 personas a lo largo de varios años.

El análisis reveló que las personas con hipertensión tenían un mayor riesgo de desarrollar demencia en comparación con aquellas sin esta condición. Sin embargo, los hallazgos también señalaron una asociación interesante: aquellos diagnosticados con hipertensión que consumían de media taza a una taza completa de café o té diariamente mostraban un menor riesgo de demencia. Esta relación podría proporcionar una nueva perspectiva sobre la dieta de las personas con problemas de presión arterial.

Además, los investigadores encontraron que el tipo de café que se consume hace una diferencia notable. Aquellos que molían sus propios granos de café parecían obtener beneficios aún mayores en la reducción del riesgo de demencia. Esto sugiere que la calidad y el método de preparación del café podrían jugar un papel vital en la maximización de sus beneficios para la salud.

El equipo de Sun concluye que el consumo de bebidas con cafeína podría ser una estrategia clave para quienes sufren de hipertensión, ayudando a disminuir la inflamación y, en consecuencia, el riesgo de demencia. ¡Increíble, ¿verdad?! Esto podría cambiar la forma en la que vemos nuestra taza de café! No olvides consultar con un médico si estás preocupado por tu salud cerebral.