Durante mucho tiempo se pensó que el consumo de café podría tener efectos negativos en la salud, pero recientes estudios han demostrado que, en realidad, este popular brebaje tiene múltiples beneficios para nuestro cuerpo. Los consumidores habituales de café presentan un menor riesgo de sufrir ataques cardíacos, derrames cerebrales y enfermedades hepáticas, así como trastornos neurodegenerativos como el Alzheimer.

Una investigación reciente publicada en la reconocida revista 'BMJ Medicine' destaca que la cafeína no solo ayuda a aumentar la termogénesis, es decir, la producción de calor, sino que también facilita la oxidación de las grasas, lo que podría contribuir a la pérdida de peso y reducir el riesgo de enfermedades como la diabetes tipo 2 y la obesidad.

Ahora, un estudio más reciente liderado por la Universidad de Tulane (en Nueva Orleans, EE.UU.) ha arrojado más luz sobre este tema, mostrando que beber café tiene un efecto protector contra el riesgo cardiovascular, pero solo si se consume en la mañana. Los investigadores afirmaron que disfrutar de café por la tarde o noche no ofrece los mismos beneficios para la salud cardíaca.

"Hasta ahora, las investigaciones sugieren que el consumo de café reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y algunas enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2", comentó Lu Qi, investigador principal y profesor de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Tulane. Los hallazgos de este estudio fueron publicados en el European Heart Journal.

Beneficios en la salud del corazón

El equipo de investigación analizó datos de más de 40,000 adultos estadounidenses, rastreando sus hábitos de consumo de café y su salud entre 1999 y 2018. Los participantes fueron clasificados en tres grupos: bebedores de café por la mañana (36%), bebedores de café durante todo el día (16%) y no bebedores de café (48%).

Los resultados revelaron que aquellos que consumían de una a varias tazas de café antes del mediodía tenían un 31% menos de riesgo de enfermedades cardiovasculares que aquellos que lo hacían más tarde; además, presentaban un 16% menos de probabilidades de morir por cualquier causa, en comparación con los que no consumían café.

Estos beneficios se observaron tanto en los bebedores "moderados" (dos a tres tazas) como en los "empedernidos" (más de tres tazas) que tomaban café por la mañana. Incluso quienes saboreaban café de manera ligera por las mañanas tenían algún beneficio, aunque menos significativo. Sin embargo, no se detectó ninguna reducción en el riesgo para aquellos que bebían café en otros momentos del día.

¿Por qué es crucial la hora del día?

Según los autores del estudio, consumir café después del mediodía puede afectar nuestros ritmos circadianos, que son fundamentales para regular nuestros ciclos biológicos. El consumo de café por la tarde o noche puede alterar el sueño al suprimir la melatonina, una hormona clave para un buen descanso. Esto podría dar lugar a cambios en factores de riesgo cardiovascular, como inflamación y presión arterial elevada.

Sin embargo, los investigadores también señalaron que aún se requieren más estudios para validar estos hallazgos en otros grupos de población. Es vital que se realicen ensayos clínicos para investigar cómo el horario de consumo de café puede impactar la salud cardiovascular.