El fútbol tiene la increíble capacidad de unir a personas de todas partes del mundo. No importa la nacionalidad o el idioma, un partido en la televisión puede transformar a extraños en amigos apasionados. Esta conexión se hace aún más evidente con los aficionados de los equipos hispalenses, que mantienen su fervor por el Sevilla y el Betis en cada rincón del planeta. Este domingo, se espera una gran atención mundial durante el derbi sevillano, y entre los lugares destacados, Londres juega un papel central.

En la capital británica, los aficionados están divididos entre los colores blanquirrojos del Sevilla y los verdiblancos del Betis. La Peña Bética de Londres, bajo la dirección de Antonio, se ha propuesto llenar de verde y blanco las calles londinenses. Desde su creación en 2015, cuando solo eran un par de amigos, han crecido a más de 150 miembros. Se reúnen en un pub irlandés, rompiendo las barreras geográficas con su lema: "No estamos en casa, pero sí en familia".

Curiosamente, también hay una Peña Sevillista en Londres, presidida por otro Antonio, quien comparte la misma historia de unión y pasión por su equipo. Aunque se conocen, mantienen una relación cordial más que cercana. Ambos coinciden en que la atmósfera del derbi se siente intensamente, incluso a distancia. El presidente de la Peña Bética destaca que el WhatsApp se llena de mensajes de 'guasa sevillana' en los días previos al partido, creando una tensión palpable entre los aficionados.

Ambos Antonio están de acuerdo en que unirse para ver los partidos te acerca a tu ciudad natal, Sevilla, especialmente en un día tan especial como el derbi. El presidente de la Peña Bética también celebra una reciente ventaja: "Ahora tenemos Cruzcampo", refiriéndose a la cerveza que ha comenzado a estar disponible en su pub. El fútbol es el hilo conductor que une a los aficionados, sirviendo de vínculo y creando una familia internacional que comparte la misma locura por sus equipos.

Entre estos aficionados trotamundos, uno de los más conocidos es Junior, un apasionado bético desde Charleroi, Bélgica. Su historia de amor con el Betis comenzó en 2005, cuando se unió a la familia de su esposa. Desde entonces, ha hecho del viaje a Sevilla una rutina, visitando el estadio casi 20 veces al año. "El Betis representa una gran familia, una pasión indescriptible. La atmósfera en el estadio es extraordinaria, y es un club que realmente me tiene cautivado", comparte entusiasmado sobre su vínculo con el equipo.

Este derbi no solo es un partido; es un evento que reúne a aficionados de todo el mundo, demostrando que el amor por el fútbol y la lealtad a un club pueden superar distancias. Desde las calles de Londres hasta los estadios de Sevilla, la pasión por el equipo se vive y se siente, creando una comunidad global unida por los colores blanquirrojo y verdiblanco.