El Ministerio de Sanidad de España ha dado a conocer sus próximos movimientos en la lucha contra el tabaquismo, anunciando que se prohibirán los cigarrillos electrónicos desechables y se eliminarán los saborizantes en su comercialización. Este ambicioso plan será parte de la modificación del Real Decreto 579/2017, que regula la fabricación, presentación y comercialización de productos relacionados con el tabaco.

Javier Padilla, el número dos del Ministerio, destacó en un reciente desayuno informativo que estas medidas no son solo políticas de salud pública, sino que también se centran en la protección de la infancia y juventud. De acuerdo con Padilla, los cigarrillos electrónicos han reintroducido el tabaquismo a muchos jóvenes que antes veían fumar como algo poco atractivo: “Son la puerta de entrada al tabaquismo entre los más jóvenes”, subrayó.

Las cifras son alarmantes; las estadísticas muestran que el porcentaje de estudiantes de entre 14 y 18 años que fuma diariamente ha descendido de un 23,5% en 1996 a un 7,5% en 2023. Sin embargo, el uso de cigarrillos electrónicos se ha disparado: actualmente, un 54,6% de los adolescentes reconoce haberlos probado, comparado con solo un 17% hace diez años. La encuesta Estudes incluso revela que hasta un 14,5% de los estudiantes de apenas 13 años ha utilizado estos dispositivos.

Amazingly, esta prohibición se presenta con retos significativos, ya que se enfrenta a la oposición de varios grupos de presión. No obstante, ya estaba contemplada en el plan antitabaco aprobado en abril, que ahora se concreta en medidas específicas.

Además, el equipo del Ministerio planea dar prioridad a la reforma de la ley 28/2005, que ampliará los espacios libres de humo, aunque aún no se han establecido plazos concretos para esta acción. Este tema ha sido controversial, ya que algunas comunidades se ha opuesto a la prohibición de fumar en terrazas, alineándose con los intereses de los hosteleros. La presión de la Comisión Europea la semana pasada ha llevado a que se sugiera extender las áreas sin humo a espacios al aire libre como terrazas y paradas de autobús.

El Ministerio de Sanidad sigue comprometido en su esfuerzo por reducir el consumo de tabacos entre la población joven. La pregunta es: ¿serán estas nuevas medidas suficientes para erradicar la cultura del vaping entre las nuevas generaciones? ¡Los próximos meses serán cruciales para observar los resultados de esta estrategia!