La NASA ha informado que este martes 1 de octubre se ha detectado una poderosa llamarada solar, clasificada como X7.1, que tiene el potencial de provocar una tormenta geomagnética en nuestro planeta en las próximas 48 horas. ¡Este fenómeno podría traer consigo intensas auroras boreales en regiones donde normalmente no se pueden observar!

Esta es la segunda llamarada solar más intensa registrada en el año 2023. Las llamaradas solares pertenecen a las clases A, B, C, M y X, siendo la clase X la más potente. El número asociado a estas clasificaciones indica la magnitud exacta de la explosión.

Las erupciones solares son explosiones de energía inmensa que pueden interferir con las comunicaciones por radio, alterar las redes eléctricas y afectar las señales de navegación, lo que plantea riesgos significativos para las misiones espaciales y la seguridad de los astronautas en el espacio.

Las auroras polares, tanto boreales en el hemisferio norte como australes en el hemisferio sur, son causadas por la interacción del viento solar, compuesto por partículas cargadas, con el campo magnético de la Tierra. Este proceso ocurre cíclicamente, en ciclos de aproximadamente 11 años, que incluyen fases de máxima y mínima actividad solar.

Desde finales de 2019, el Sol ha estado en el ciclo solar 25, el cual se estima alcanzará su máximo en la segunda mitad de 2025. A medida que nos acercamos a este apogeo, se incrementa la actividad solar, lo que resulta en más manchas solares y llamaradas, lo que a su vez puede traducirse en auroras todavía más espectaculares.

¡No te pierdas la ocasión de observar este fenómeno natural y sorprendente! Si vives en zonas donde no es común ver auroras boreales, prepárate para una vista que podría dejar sin aliento a los observadores!