Investigadores del reconocido hospital Mount Sinai School de Nueva York están a la vanguardia de un intrigante estudio sobre la detección temprana de la demencia y el Parkinson. Pero lo asombroso es que estos trastornos neurodegenerativos podrían tener un signo oculto durante las horas de sueño: el comportamiento inusual de los pacientes mientras duermen.

Cada vez más evidencia sugiere que las personas que presentan movimientos excesivos en la cama, o que hablan, gritan o incluso maldicen, pueden tener un riesgo incrementado de sufrir demencia o enfermedad de Parkinson. Un aspecto clave de esta investigación es el trastorno de conducta del sueño REM (RBD), donde las personas muestran una alteración significativa en su fase de sueño reparador.

Los científicos han descubierto que estos comportamientos inquietantes están relacionados con la inflamación en el área del cerebro que produce dopamina, un neurotransmisor esencial para el funcionamiento normal del sistema nervioso. Curiosamente, muchos pacientes diagnosticados con demencia o Parkinson presentan niveles reducidos de dopamina debido a la muerte de las células que la producen.

Para abordar esta problemática, el equipo de Mount Sinai ha creado un innovador algoritmo asistido por Inteligencia Artificial que analiza grabaciones clínicas de los patrones de sueño. Esto tiene como objetivo facilitar la identificación del trastorno de conducta del sueño REM, que es notoriamente difícil de diagnosticar porque sus síntomas suelen confundirse con otras condiciones médicas.

El doctor Emmanuel During, profesor de neurología en Mount Sinai School of Medicine, explica que este enfoque automatizado podría revolucionar la interpretación de los tests de sueño. "Podríamos integrar este método en la práctica clínica, mejorando la precisión de los diagnósticos. Además, permitiría informar a los pacientes sobre su condición y personalizar los tratamientos según la gravedad de sus síntomas." Este avance podría ser crucial no solo para detectar enfermedades neurodegenerativas de forma anticipada, sino también para mejorar la calidad de vida de quienes se ven afectados.

Así que la próxima vez que oigas risas, gritos o maldiciones provenientes de algún lugar en la noche, podrías estar ante una revelación inquietante sobre la salud mental de alguien. ¡Es un claro llamado a la vigilancia en el cuidado de nuestros seres queridos!