En agosto de este año, la compañía china Mingyang presentó al mundo su audaz creación: el aerogenerador más potente del planeta, con una impresionante capacidad de 20 MW y diseñado para resistir tifones. Sin embargo, lo que parecía ser un gran avance en la energía renovable ha dado un giro inesperado, ya que se han reportado roturas en dos de sus aspas.

Recientes informes han confirmado que el prototipo, ubicado en Lingao, Hainan, ha sufrido fallas durante las pruebas. En un comunicado a través de redes sociales, Mingyang indicó que el aerogenerador fue sometido a condiciones de prueba "extremas y anormales" para asegurarse de que cumpliera con los rigurosos estándares de seguridad y eficiencia.

Imágenes filtradas sugieren que durante su funcionamiento, el prototipo MySE18.X sufrió un accidente, mostrando las aspas desprendiéndose mientras el generador continuaba girando. A pesar de las especulaciones, la compañía no ha confirmado ni desmentido este incidente.

La resistencia a los tifones es una de las características más promocionadas de estas turbinas. El modelo MySE18.X fue presentado con la capacidad de soportar vientos de hasta 79,8 m/s. De hecho, solo un mes después de su instalación, logró resistir el supertifón Yagi, que causó estragos en un parque eólico cercano. Sin embargo, la reciente rotura de aspas plantea serias dudas acerca de esta afirmación.

Con un diseño modular y ligero, el MySE18.X tiene un diámetro de rotor que varía entre 260 y 292 metros. Mingyang ha revelado que, en condiciones óptimas, la turbina podría generar 80 millones de kWh anuales con una velocidad media del viento de 8,5 m/s. No obstante, es importante mencionar que, hasta el momento, este modelo se encuentra en fase de prototipo y no ha sido comercializado.

A pesar de que se le considera el más grande, Mingyang también ha anunciado el desarrollo del MySE de 22 MW con un rotor de 310 metros y aspas de fibra de carbono. La competencia en el sector de aerogeneradores marinos en China se intensifica, especialmente después de que la Dongfang Electric Corporation instalara un aerogenerador de 26 MW, capaz de resistir tifones de categoría 17.

La carrera por construir infraestructuras renovables en China se ha vuelto feroz, donde cada compañía busca superar a la otra en tamaño y capacidad. Sin embargo, este ambiente competitivo puede traer consigo riesgos significativos, como lo evidencian estos recientes fallos. Por fortuna, hasta ahora no se han reportado lesiones graves como resultado de los fallos del prototipo.

China sigue avanzando en su camino hacia las energías renovables, pero con la presión de la competencia, se debe tener cuidado para evitar tragedias en el futuro. ¿Podrá Mingyang solucionar rápidamente estos problemas técnicos y mantenerse a la vanguardia del sector? La respuesta podría definir el futuro de la energía eólica en el país.