Gustavo Santaolalla no solo es considerado por muchos como el mejor productor musical de Argentina, sino que también se destaca como un innovador compositor que constantemente busca nuevas formas de expresar su identidad musical. Su fusión de folklore argentino y rock ha paved el camino para artistas emergentes, haciendo de su carrera una de las más influyentes del país. Su talento ha sido reconocido internacionalmente, especialmente por las emblemáticas bandas sonoras de películas como Brokeback Mountain y Babel, que le valieron sendos premios Oscar.

Ayer, Santaolalla deslumbró al público en el Palacio de la Ópera de A Coruña, donde celebró el 25.º aniversario de su aclamado álbum Ronroco. Este álbum, que destaca por su riqueza sonora, ha sido un pilar en la música andina moderna. Durante el concierto, el músico se adentró en el mundo de su instrumento emblemático, el ronroco, un charango de mayor tamaño que aporta un sonido único y envolvente, que conquistó a todos los presentes. El artista, acompañado de una banda excepcional, ofreció una velada mágica llena de emoción y nostalgia.

El entusiasmo del público no se hizo esperar. “¡Fue una visita histórica!”, proclamó un fan emocionado, mientras otros elogiaban la destreza y la pasión con la que Santaolalla interactuó con su música. Este concierto no solo reafirmó su estatus como ícono cultural, sino que también dejó a los asistentes con la promesa de más experiencias sonoras que trascienden fronteras. Sin duda, una noche que quedará grabada en la memoria de todos los que tuvieron la fortuna de asistir.