Recientemente, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) ha cerrado su investigación sobre Grifols, dejando atrás la incertidumbre que pesaba sobre la farmacéutica española. En una carta enviada el 1 de octubre, el regulador estadounidense confirmó que ha "completado la revisión de sus presentaciones", sin mencionar sanciones ni nuevas investigaciones. Esta decisión ha sido recibida con alivio entre los inversores, llevando a un repunte notable en las acciones de Grifols.

La reafirmación de la SEC valida las explicaciones que la compañía ofreció en su defensa tras las acusaciones de fraude lanzadas por Gotham City Research. Este giro ha generado un clima de confianza entre los accionistas, revitalizando el interés en Grifols, que ha mostrado señales de un cambio positivo tanto a corto como a medio plazo.

Técnicamente, el incremento en el precio de las acciones ha llevado a Grifols a superar los máximos de las últimas semanas, sugiriendo que se avecina una nueva etapa alcista que podría catapultar a la empresa hacia niveles más altos, siempre y cuando se mantenga la actual confianza del mercado.

En términos históricos, las acciones de Grifols alcanzaron un pico de 15,92 euros a finales de 2023, seguido de una fuerte desaceleración que las llevó a un mínimo de 6,36 euros en poco más de dos meses. Este periodo de inestabilidad ha sido crucial para el futuro de la empresa, pero la caída ha sido contrarrestada por una tendencia reciente de recuperación positiva, caracterizada por la formación de máximos y mínimos en ascenso.

El avance del precio ha permitido a Grifols recuperar ya el 38,20% de su caída previa, encontrando resistencia en los 10,35 euros, un nivel crucial que ha frenado su avance durante varias semanas. Sin embargo, la formación de una figura triangular sugiere que la compañía está en una fase de resolución, augurando más movimientos alcistas si se superan los niveles actuales.

Hoy lunes, Grifols ha roto la resistencia de 10,35 euros y parece continuar con la tendencia ascendente iniciada desde el pasado viernes. Este trayecto alcista abre las puertas a un nuevo objetivo en la resistencia horizontal de 11,14 euros, que coincide con el 50% de retroceso de Fibonacci del último tramo bajista.

Además, la superación de sus medias móviles más representativas se presenta como una señal clara de fortaleza, especialmente la de corto plazo (50 sesiones), que actúa como soporte, lo que podría facilitar un impulso sostenido en el precio.

Con el futuro de Grifols en la balanza y un mercado en recuperación, ¿será que veremos un nuevo máximo histórico? Los inversores están atentos y las expectativas son altas. ¡No te pierdas cómo se desarrolla esta emocionante saga!