Según la firma de inversión Federated Hermes, la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) está lista para aprobar la oferta pública de adquisición (opa) que BBVA lanzó para hacerse con Banco Sabadell, y se espera que esto ocurra antes de la Semana Santa.

Filippo Alloatti, director de finanzas en Federated Hermes, comentó sobre el reciente ajuste que BBVA realizó en su exposición de la oferta, lo cual considera un simple "tecnicismo" para contabilizar las acciones propias que Banco Sabadell tiene en su tesorería.

Los analistas opinan que una vez que la CNMC dé su visto bueno, será el turno de los accionistas de Banco Sabadell para decidir si aceptan o rechazan la oferta. Alloatti enfatizó: "En mi opinión, la operación tiene sentido desde el punto de vista financiero".

Un cambio clave en la aceptación mínima

BBVA anunció un cambio significativo en la condición de aceptación mínima, pasando del 50,01% del capital social de Banco Sabadell a un nuevo umbral que exige "más de la mitad de los derechos de voto efectivos". Este ajuste excluye las acciones en autocartera del Banco Sabadell al momento de culminar el plazo de aceptación.

Aunque algunos expertos indican que este ajuste no representa una mejora sustancial, hay interpretaciones alternativas sobre el cambio anunciado. Según analistas de RBC, Benjamin Toms y Pablo de la Torre, la modificación no solo busca facilitar la aprobación por parte de los accionistas, sino que también fue realizada a solicitud del regulador, actuando como una rectificación de un "descuido anterior".

"Parece ser que hubo un pequeño error en el borrador por parte de los abogados del banco o de algunos ejecutivos", apuntaron los asesores, lo que podría haber dirigido a este cambio crucial en la oferta. La posible consolidación entre BBVA y Banco Sabadell podría transformar el panorama bancario español, creando un gigante en el sector con el capital y recursos necesarios para competir mejor a nivel europeo. Los accionistas, analistas y el mercado estarán atentos a esta crucial aprobación de la CNMC que podría definir el futuro de las finanzas en España.