Esta tarde, bajo el poderoso lema "Som País, parlem valencià", tuvo lugar una masiva manifestación en Valencia, convocada por la Comissió 9 d'Octubre para celebrar el Día de la Comunidad Valenciana. A las seis en punto, cientos de manifestantes comenzaron a marchar desde la plaza de San Agustín. Aunque al inicio la asistencia fue modesta, rápidamente se unieron más personas, llenando las calles de la ciudad con un mensaje claro y fuerte. Según la Delegación del Gobierno, alrededor de 2.000 ciudadanos participaron en una marcha pacífica sin incidentes, demostrando la fuerza del movimiento.

En la cabecera de la manifestación, se podían ver a destacados representantes de diversas entidades, entre ellos Lluís Llach, presidente de la Assemblea Nacional Catalana, quien denunció los "ataques lingüísticos" y advirtió sobre un futuro incierto si no se defienden los derechos culturales y lingüísticos. Tras esta primera marcha, los jóvenes de la Coordinadora Obrera Sindical también se unieron a la causa, destacando su rechazo a la ley de libertad educativa del gobierno valenciano. Su manifiesto fue leído con fervor en Porta de la Mar.

"No somos la 'Terreta' ni el Levante de nadie, somos un País", enfatizó Josepa Acosta, portavoz de la Comissió 9 d'Octubre. Este es un momento crítico para la lengua valenciana, y muchos manifestantes compartieron sus preocupaciones por la involución de derechos lingüísticos y el riesgo que enfrenta el País Valencià frente a nuevas legislaciones que subestiman su importancia.

La manifestación, que incluía a grupos diversos como Acció Cultural del País Valencià (ACPV), Compromís, y la Plataforma per la Llengua, se erigió como un grito unánime por el derecho a vivir y hablar en valenciano. El manifiesto leído frente a la estatua de Jaume I, por Gemma Pasqual de la Societat Coral El Micalet, subrayó la urgencia de defender la lengua valenciana contra las políticas del Consell que buscan relegarla a una lengua secundaria. Con aplausos, la autora estableció que "nuestro idioma es la esencia misma de nuestra identidad", mientras el público respondía con entusiasmo.

Además, se dieron menciones emotivas a personajes significativos de la lucha por la libertad, como Miquel Grau y Guillem Agulló, así como a los fusilados de las fosas de Paterna. El fervor de la multitud por recordar a aquellos que dieron su vida por la libertad era palpable, y se escucharon contundentes aplausos acompañando la demanda de respeto hacia artistas icónicos de la cultura valenciana, como Fuster y Estellés.

Este evento no solo conmemora el Día de la Comunidad Valenciana, sino que también destaca la necesidad de un compromiso renovado por la defensa del valenciano. La comunidad mostró que está lista para luchar por su identidad y su lengua, reiterando en cada esquina de Valencia que el valenciano no es solo un idioma, sino una parte fundamental de su cultura.