Un reciente estudio que analiza 300 millones de textos extraídos de internet revela una preocupante tendencia hacia la simplificación del lenguaje en las últimas décadas. La investigación, que se basa en comentarios de ocho grandes redes sociales (Facebook, Twitter, YouTube, Voat, Reddit, Usenet, Gab y Telegram), muestra una notable reducción en el vocabulario y el uso de formas verbales complejas. Walter Quattrociocchi, profesor de la Universidad de La Sapienza de Roma y coautor del estudio publicado en la revista PNAS, señala que aunque las estructuras lingüísticas varían, esta tendencia de empobrecimiento lingüístico es probablemente global y repercute en varios idiomas, especialmente en aquellos que dominan el espacio digital.

La simplificación del lenguaje no solo tiene implicaciones lingüísticas, sino también sociales. Dado que internet se ha convertido en el principal foro de debate público, la reducción en complejidad y matices de las expresiones puede llevar a la superficialidad en las discusiones. "Hay una relación directa entre la simplificación del lenguaje y la superficialidad en argumentos e ideas", explica Quattrociocchi. Un léxico limitado puede resultar en debates más simples, una tendencia que se observa incluso en la política, donde la falta de profundidad textual contribuye a la polarización de las opiniones.

La investigación, que recoge datos de más de 30 años, sugiere que la simplificación no es un fenómeno exclusivo de internet; ha acompañado a cambios sociales y culturales a lo largo de la historia, como la urbanización y la colonización. Sin embargo, la velocidad y el alcance de internet han acelerado este proceso. Los algoritmos de las redes sociales, que priorizan el contenido simple y emocional, facilitan la difusión de estas narrativas simplificadas, limitando la diversidad de ideas en lo que debería ser un espacio de diálogo abierto y plural.

Esta tendencia plantea serias inquietudes sobre la efectividad del discurso actual en tiempos que demandan una comprensión más matizada de problemas globales complejos. La polarización es uno de los resultados más destacados de esta simplificación. Según los estudios, el lenguaje simplificado promueve un pensamiento binario, creando identidades cerradas que son difícilmente permeables a nuevas ideas. Las redes sociales amplifican contenido polarizante, lo que fomenta la segregación de los debates, haciendo que los usuarios interactúen principalmente con ideas que refuercen sus propias creencias.

Sin embargo, este fenómeno también presenta aspectos positivos que no deben ser ignorados. La simplificación del lenguaje puede facilitar la comprensión de temas difíciles para un público más amplio. El uso de memes y nuevas formas de expresión digital permite una comunicación más rápida y dinámica en un mundo altamente interconectado. "La evolución del lenguaje en línea no es solo un retroceso; es un laboratorio vivo de comunicación humana, donde la creatividad florece a través de nuevas expresiones y conceptos", concluye Quattrociocchi.

¿Estamos ante un futuro donde la riqueza lingüística continua decreciendo? Mientras la complejidad del mundo aumenta, la calidad de nuestras interacciones podría depender de un esfuerzo colectivo por cultivar un vocabulario y un pensamiento más amplios y profundos.