El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha decidido abrir una investigación formal al juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, a raíz de sus polémicas declaraciones sobre Podemos y la exministra de Igualdad, Irene Montero. Velasco hizo referencia al hecho de que Montero podría ofrecer lecciones desde su antiguo trabajo como cajera en Mercadona, una crítica que ha desatado una fuerte controversia en el ámbito político y judicial.

Desde la semana pasada, tras la asunción del nuevo promotor de la acción disciplinaria, Ricardo Conde, se iniciaron las diligencias informativas. Este procedimiento es habitual cuando se reciben quejas, y en lo que va del año, el CGPJ ha tratado unas 600, lo que evidencia una creciente tensión entre el poder judicial y el político.

Las declaraciones de Velasco, presentadas en una conferencia sobre normativas empresariales el pasado 13 de noviembre, remarcaban que, a su juicio, el partido Podemos había intentado explicar conceptos jurídicos básicos a profesionales del derecho. “A un jurista, que llevamos desde el derecho romano sabiendo lo que es el consentimiento... Irene Montero no puede darnos clases desde su cajero de Mercadona”, afirmó el juez. Este tipo de comentarios ha sido utilizado en el pasado por sus detractores para poner en entredicho la legitimidad de la exministra.

Además, Velasco se refirió a la actual situación política, argumentando que la legitimidad de un partido que ha perdido las elecciones es bastante inferior en comparación con aquellos que las han ganado. En este sentido, criticó la posición de Sumar tras las elecciones de 2023, donde el partido del PP emergió como el más votado. Esta opinión ha generado debates acalorados entre los diferentes sectores políticos.

Por otro lado, el juez Manuel Ruiz de Lara también se encuentra bajo investigación por sus comentarios en redes sociales, donde atacó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a su esposa, Begoña Gómez. Esta situación ha llevado a que el PSOE exija acciones disciplinarias contra Ruiz de Lara, lo que ha intensificado las discusiones sobre la independencia del poder judicial.

Ambos casos ponen de manifiesto un clima de creciente confrontación entre jueces y el Gobierno, lo que plantea serias interrogantes sobre la imparcialidad y la profesionalidad en el mundo judicial. Este escándalo ha captado la atención de los medios, y es posible que se espere que el CGPJ actúe con rigidez ante estas controversias, lo que podría tener repercusiones negativas tanto para Velasco como para Ruiz de Lara.