En un giro dramático de los acontecimientos, Íñigo Errejón, exdiputado de Sumar, ha sido acusado por la actriz Elisa Mouliá de presentar una "falsa denuncia". Según Errejón, los hechos que ella describe "distan mucho" de la realidad que su defensa pretende demostrar. Este conflicto ha llevado a su equipo legal a presentar un recurso ante la Audiencia Provincial de Madrid, tras la decisión de un juez de suspender provisionalmente el caso por supuestos abusos sexuales.

El juez Adolfo Carretero, tras una solicitud de la abogada de Mouliá, que está a punto de dar a luz, decidió suspender la causa y archivarla "por imperativo legal" hasta que la abogada presente su alta médica. Este movimiento ha generado controversia y descontento, llevando a Errejón a calificar la actuación de Mouliá de "fraude de ley". Según él, esta estrategia busca "dilaciones indebidas" en un caso que ya tiene un considerable impacto mediático, lo que prolonga su sufrimiento a la espera de una resolución.

Ante estas acusaciones, Elisa Mouliá respondió públicamente este jueves, defendiendo la veracidad de su denuncia. Afirma que su relato sobre la supuesta agresión sexual es completamente cierto y "con pelos y señales". "Entiendo que hay un gran enojo, pero calificar mi denuncia de falsa es, simplemente, lamentable porque no lo es", declaró la actriz en el programa 'Y ahora Sonsoles' de Antena 3.

Este tenso enfrentamiento ha llamado la atención no solo por las acusaciones graves, sino también porque Santiago Abascal, líder de VOX, ha expresado su apoyo a Errejón en medio de esta controversia. La situación ha desencadenado un debate feroz en la opinión pública sobre la credibilidad de las denuncias por agresión sexual y el funcionamiento del sistema judicial en España. ¿Quién saldrá victorioso de este tumultuoso episodio? La sociedad española observa con interés la evolución de este casó que ha puesto en jaque a la política del país.