La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, está en el centro de una tormenta política tras la sorprendente dimisión de Thierry Breton, comisario de Mercado Interior, quien ha denunciado que fue vetado debido a su mala relación con la presidenta.

Durante semanas, Von der Leyen ha estado formando su nuevo equipo para su segundo mandato, que se extenderá hasta 2029, buscando un equilibrio de género y presionando a los Estados miembros para que logren una paridad entre comisarios y comisarias. Sin embargo, este objetivo de igualdad parece haber tenido un costo oculto, ya que los rumores indican que aquellos que no gozan de su confianza han sido excluidos del nuevo equipo.

Breton, que contaba con el respaldo del presidente francés Emmanuel Macron para continuar en su cargo, lamentó que su relación con Von der Leyen no fuese la mejor. Se dice que la presidenta ha intercambiado este veto por promesas de mayor influencia para Francia dentro de la Comisión. Según fuentes cercanas a Breton, al enterarse de su exclusión, tomó la decisión de dimitir de inmediato, eludiendo ser despedido, pero no sin antes lanzar duras acusaciones hacia Von der Leyen, acusándola de ser intrigante.

Este choque de egos en la cúpula de la Unión Europea plantea interrogantes sobre la estabilidad del nuevo equipo y sobre el futuro de la política europea. ¿Podrán los líderes europeos superar esta crisis o se producirá un cisma en el corazón de la política comunitaria? Seguiremos informando sobre este desalentador capítulo en la historia de la Unión Europea.