
¡Escándalo en Israel! El país corta la financiación a los Oscars tras premiar una película sobre un niño palestino
2025-09-18
Autor: José
El eco del reciente evento de los Oscars israelíes resuena con fuerza como un auténtico terremoto político. El Ministerio de Cultura de Israel ha tomado la drástica decisión de retirar la financiación a los premios Ophir, conocidos popularmente como los Oscars israelíes, tras la elección de 'The Sea' como Mejor Película.
Este filme, dirigido por el israelí Shai Carmeli Pollak, narra la emotiva historia de un niño palestino de solo 13 años, Muhammad Gazawi, quien se embarca en un viaje hacia el mar después de que el Ejército israelí le impidiera cruzar un control durante una excursión escolar. Un relato conmovedor que ha tocado el corazón de muchos.
Durante la ceremonia, no solo se entregó el premio a 'The Sea', sino que varios nominados se vistieron con camisetas que llevaban frases contundentes como "Un niño es un niño" y "Parad la guerra", mientras se escuchaban llamados a poner fin al conflicto en Gaza. Esto claramente no cayó bien en ciertas esferas políticas.
El ministro de Cultura, Miki Zohar, respondió con indignación, afirmando que desde el presupuesto de 2026 en adelante, "esta patética ceremonia no será financiada por los contribuyentes". En un tono desafiante, dejó claro que no se permitirá que el cine que, a su juicio, "escupe en la cara de nuestros soldados", sea apoyado con dinero público.
Zohar no escatimó en críticas, calificando la película como "escandalosa" y asegurando que ha ofendido a muchos israelíes y a sus soldados. Sin embargo, fuentes dentro del ministerio de Cultura han revelado a la radio pública israelí 'Kan' que el propio Zohar no ha visto el filme que tanto revuelo ha causado.
Este giro en la narrativa cultural israelí subraya una época divisiva donde el arte y la política chocan en el escenario global. ¿Qué impacto tendrá esta decisión en la comunidad artística y en la percepción mundial del conflicto? El tiempo lo dirá, pero sin duda, las llamas de la controversia están lejos de apagarse.