El Juzgado de Instrucción de La Bañeza ha iniciado una investigación contra un profesor de matemáticas del IES Valles de Luna, en Santa María del Páramo, quien fue detenido en plena jornada escolar por sospechas graves de pederastia. Este docente, con más de 13 años de experiencia en el centro, es objeto de múltiples denuncias tras la intervención de la Guardia Civil.

Exalumnos han comenzado a hablar en redes sociales, relatando curiosas y perturbadoras prácticas del profesor, quien, según ellos, organizaba 'juegos y retos' durante las clases, permitiendo a sus alumnos aumentar sus notas sin tomar los exámenes tradicionales. Las actividades, que en su momento parecieron inofensivas, ahora se ven con preocupación y desaprobación.

Entre los relatos más sorprendentes, destacan episodios inquietantes como untar nata en los cuerpos de los alumnos, atar a los chicos sin camiseta a percheros y hacerlos disfrazarse con barriles de cerveza sin ropa interior. Las víctimas, que en su momento no cuestionaron estas acciones, ahora las consideran 'inapropiadas' y 'abusivas'.

No obstante, algunos exalumnos siguen defendiendo una 'buena relación' con el profesor, aunque admiten que sus comportamientos siempre fueron motivo de murmullos. Una joven que prefirió permanecer en el anonimato mencionó que 'él tenía una preferencia por los chicos y todos lo sabíamos'.

Además, hasta ahora se han recopilado testimonios de exalumnos que participaron en viajes escolares organizados por el docente. Aunque en ese momento no despertaron sospechas, reflexionan con el tiempo sobre la naturaleza de esas actividades, especialmente cuando eran excluidas las alumnas.

"Es raro pensar que las paredes de su casa estaban cubiertas con firmas de los estudiantes y fotografías de él con ellos", comentó una de las jóvenes testigos, ahora de 23 años. Esta situación, al parecer, era común si uno de los chicos que asistía estaba dentro del círculo de confianza del profesor.

Los testimonios también mencionan 'castigos' aplicados en los recreos, que fueron normalizados entre los estudiantes. Uno de ellos recordó un viaje a Berlín donde el profesor despertó a los chicos en medio de la noche para que se quitaran las camisetas y les pintó símbolos en el pecho. Este tipo de conductas eran vistas como simples juegos en su momento, pero ahora son analizadas con una nueva perspectiva.

Entre otros desafíos mencionados, también se alude a un 'juego' donde los chicos eran vestidos con barriles de cerveza y se les desafiaba a deshacerse de ellos rápidamente. Las quejas de exalumnas, por su parte, apuntan a que si ellas no tenían relación con los chicos que el profesor consideraba adecuados, su presencia en estas actividades era inexistente.

Además, se supo que el profesor gestionaba grupos de WhatsApp y redes sociales como Instagram, donde subía imágenes de las actividades con sus alumnos, lo que ha suscitado aún más inquietud entre los padres.

Tras la detención, el Ampa alertó sobre una orden de alejamiento que prohíbe al docente acercarse al instituto y comunicarse con los estudiantes. Por su parte, la Dirección Provincial de Educación ha suspendido al profesor de empleo y sueldo mientras continúan las investigaciones.

Según testimonios, una de las profesoras fue la primera en dar la voz de alarma al observar comportamientos extraños del acusado, especialmente porque su hijo era alumno en el mismo centro. A pesar de que muchos exalumnos creían que 'algo así era una posibilidad', otros todavía se sorprenden al recordar cómo el profesor había logrado romper con la rutina del instituto, generando un ambiente 'demasiado cercano' y, aparentemente, confiable.

Mientras tanto, las autoridades siguen investigando para esclarecer todos los detalles y determinar el verdadero alcance de las acusaciones. El profesor, aunque bajo medidas cautelares, se encuentra en libertad a la espera de nuevos avances. Esta inquietante situación deja un eco en la comunidad educativa, que no puede evitar cuestionarse todo lo que ha sucedido a su alrededor.