Recientes informes han revelado un turbo escándalo en torno a la firma del contrato de la Supercopa que tuvo lugar en el aeropuerto de Arabia Saudí. Según testimonios de fuentes cercanas al interrogatorio, que duró casi cuatro horas, Cueto ha negado rotundamente cualquier tipo de irregularidad. Frente a la juez y el fiscal, afirmó que todas las adendas del contrato habían sido revisadas y aprobadas por la Junta Directiva y la Asamblea de la RFEF, a pesar de no poder confirmar si Ana Muñoz, ex responsable de Cumplimiento, solicitó acceso al contrato por no recordarlo.

El abogado Cueto defendió vigurosamente la validez del acuerdo, explicando que era, de hecho, ventajoso para la Federación, incluido el pago de la comisión a la empresa de Piqué, Kosmos. Subrayó que Kosmos actuaba como agente de Sela, la empresa estatal saudí, y que su comisión no representaba un gasto para la RFEF ni perjudicaba los objetivos de la organización.

Como parte de su defensa, Cueto detalló que el contrato original, firmado en septiembre de 2019, estipulaba que la Supercopa se celebraría en 2020 en Arabia Saudí. Sin embargo, la pandemia del COVID-19 afectó gravemente esta disposición, dejando en el aire un acuerdo que implicaba una suma monumental de 40 millones de euros.

Para salvaguardar el pago previsto por Sela, se introdujo una adenda que garantizaría el pago aunque el torneo se celebrara en España debido a las restricciones de viaje impuestas por la pandemia. Así, representantes de la RFEF, junto con abogados de Sela y Kosmos, se reunieron en la zona de tránsito internacional del aeropuerto para firmar el acuerdo en presencia de Piqué.

En medio de este torbellino, se mencionó también el crecimiento significativo de la firma de Cueto, quien, mientras actuaba como comisionado externo de la RFEF, vio un aumento en los beneficios de su despacho jurídico. Cueto argumentó que este crecimiento coincidió con un incremento en los pleitos promovidos, en su mayoría, por LaLiga y los asuntos contenciosos que le derivaba la Federación.

Este caso no solamente pone de manifiesto posibles irregularidades en la gestión de la Supercopa, sino que también arroja luz sobre cómo se manejan los contratos de tal magnitud en el ámbito del fútbol. ¿Qué más secretos se ocultarán tras las puertas cerradas de la RFEF? ¡Mantente al tanto!