En un giro escalofriante de los acontecimientos, la Fiscalía argentina ha señalado a tres personas en relación con la muerte del cantante Liam Payne. Los cargos incluyen «abandonó de persona seguido de muerte y suministro y facilitación de estupefacientes».

El primer acusado, quien acompañaba al ex-integrante de One Direction durante su estadía en Buenos Aires, enfrenta estas serias acusaciones por su complicidad en la tragedia. El segundo individuo es un empleado del hotel donde Payne se hospedaba, supuestamente responsable de proporcionar la cocaína al artista, mientras que el tercero, un proveedor de drogas, facilitó la sustancia al cantante en múltiples ocasiones el 14 de octubre, lo que refuerza la gravedad de la situación.

Los análisis toxicológicos revelan que los últimos días de la vida de Payne estuvieron marcados por el consumo de diversas sustancias. Según los resultados de pruebas en orina, sangre y humor vítreo, el artista presentaba trazas de «un policonsumo de alcohol, cocaína y un antidepresivo recetado».

Los forenses del Cuerpo Médico Forense (CMF) concluyeron que la causa de su muerte fue «politraumatismos» junto con «una hemorragia interna y externa», resultado de su caída desde el balcón del tercer piso del hotel en el barrio de Palermo. Este devastador evento ha dejado a los fanáticos en estado de shock.

El informe también destaca que las lesiones eran compatibles con una caída desde una altura considerable, lo que descarta la posibilidad de autolesiones o violencia de terceros. Adicionalmente, se menciona que Payne no reaccionó ni adoptó una postura defensiva antes de su caída, sugiriendo que podría haber estado en un estado de semi o total inconsciencia.

Este lamentable desenlace añade un capítulo trágico a la vida de un artista que, a pesar de su éxito, aparentemente luchaba con problemas personales y de salud. La atención se centra ahora no solo en las circunstancias de su muerte, sino también en la cultura de abuso de sustancias que rodea a muchos en la industria de la música. Mantente al tanto, ya que este escándalo sigue desarrollándose y podría tener repercusiones mucho mayores.