La ministra de Seguridad Social, Elma Saiz, ha decidido alinearse con el ministro Carlos Cuerpo en el pulso que se ha desatado entre los ministerios de Economía y Trabajo en relación con la propuesta de reducción de la jornada laboral. Saiz ya había defendido a su colega cuando la vicepresidenta Yolanda Díaz lo tildó de "mala persona" por sus reticencias a la medida, y este jueves ha reiterado su respaldo, insistiendo en la necesidad de un plan de acompañamiento que facilite la transición de las empresas a una jornada de 37,5 horas semanales.

Como titular de un ministerio clave en la economía, Saiz está participando en los grupos de trabajo designados por el Ministerio de Economía para estudiar en profundidad los detalles de esta reducción y su impacto en el sector productivo. Este análisis es fundamental antes de que el proyecto se presente ante la Comisión Delegada para Asuntos Económicos (CDGAE), donde se decidirá su rumbo final antes de la aprobación en el Consejo de Ministros.

Saiz ha manifestado su inclinación hacia una "reforma equilibrada" que no pierda de vista la composición del tejido productivo del país. Coincidiendo con el enfoque de Cuerpo, ha argumentado que el Gobierno debe "acompañar a las empresas", y ha destacado que su objetivo no solo se centra en avanzar en la protección social, sino también en garantizar la viabilidad de las empresas. "Es un win-win", enfatizó, destacando la importancia de crear un entorno favorable tanto para trabajadores como para empleadores.

En una rueda de prensa donde hizo balance de la gestión de su ministerio en 2024, Saiz subrayó la importancia de lograr acuerdos basados en el consenso, que sean equilibrados y sostenibles en el tiempo. Este enfoque es esencial para obtener el apoyo de distintos grupos parlamentarios y facilitar el proceso legislativo en el Congreso de los Diputados, tal como ha propuesto Carlos Cuerpo.

Además, la ministra desmintió las críticas que apuntan a que los ministerios socialistas estén bloqueando la tramitación urgente del anteproyecto de Ley, algo que la vicepresidenta Díaz había denunciado recientemente. Saiz aseguró que de hecho, los equipos del área económica están trabajando intensamente para que la medida avance "cuanto antes", superando todos los requerimientos legales, incluida su revisión en la CDGAE.

Mirando hacia el futuro, Saiz anunció que a finales de enero se reunirá con los agentes sociales para iniciar las conversaciones sobre una de las reformas más ambiciosas que tiene en mente: la implementación de "altas progresivas". Esta medida ha suscitado mucha controversia, especialmente cuando se sugirió que podría permitir "bajas flexibles" para trabajadores que estén en tratamiento por enfermedades graves, como el cáncer, para que puedan mantener un equilibrio entre su salud y su desempeño laboral.