Un soldado norcoreano, que fue capturado por el ejército ucraniano mientras luchaba junto a las fuerzas rusas, ha tragicamente sucumbido a sus heridas. Según los servicios de inteligencia de Corea del Sur, este anuncio fue confirmado el viernes, 27 de diciembre de 2024. La agencia de espionaje aliada ha indicado que el soldado, quien fue capturado con vida el 26 de diciembre, sufrió heridas de gravedad que no pudo superar.

Este caso marca un hito significativo, ya que es el primero que se ha conocido desde que Ucrania y varios países occidentales informaron sobre el despliegue de tropas de Pyongyang en el conflicto. La participación de un ejército extranjero, específicamente de Corea del Norte, en la guerra en Ucrania representa una escalada alarmante en el conflicto, que se intensificó después de que Rusia lanzara su invasión hace casi tres años.

Kiev ha afirmado que alrededor de 12,000 soldados norcoreanos, incluidos unos 500 oficiales y tres generales, están actualmente desplegados en la región rusa de Kursk, donde el ejército ucraniano ha estado llevando a cabo una ofensiva desde agosto. Se reporta que estas tropas comenzaron a participar en combates activos a mediados de diciembre. Sin embargo, es importante destacar que hasta ahora, ni Rusia ni Corea del Norte han confirmado la existencia de este contingente militar en el conflicto.

En medio de esta turbulencia, las fuerzas rusas han reportado la captura de varias localidades en el este de Ucrania. Según el Ministerio de Defensa de Rusia, en la última semana han tomado otras cuatro localidades, aumentando a un total de ocho en ese período. Entre estas localidades se encuentran Guigant y Ostróvskoe (Konstiantinópolske, según Ucrania), ambas al sur del bastión ucraniano de Kurájove. Además, las tropas de la agrupación militar Zapad han logrado capturar Zahryzove (en la región de Járkov) e Ivanivka (Donetsk).

Por su parte, el Ejército de Ucrania reportó haber derribado 13 drones lanzados por Rusia en un ataque aéreo que también involucró el uso de misiles balísticos por parte del ejército ruso. Esta escalada de hostilidades y la implicación de fuerzas extranjeras elevan aún más las tensiones en la región y abren nuevas preguntas sobre el futuro del conflicto.

Con la situación aún en desarrollo, la comunidad internacional observa con preocupación cómo estos eventos pueden influir en la dinámica del conflicto ucraniano y la estabilidad regional.