En un despliegue notable de diplomacia, el rey Felipe VI pronunció su discurso durante la reciente Pascua Militar el pasado 6 de enero, aunque no sin controversia. Una versión preliminar de este discurso incluía una mención a la dictadura de Franco, describiéndola como 'una página oscura de nuestra historia común y un tiempo de división de los españoles, hoy felizmente superado'. Sin embargo, esta alusión fue eliminada en la versión final, lo que ha suscitado un gran debate en los medios y las redes sociales.

El pasaje omitido destacaba la importancia de la transformación de las Fuerzas Armadas españolas tras la dictadura, un proceso que contribuyó significativamente al afianzamiento de la democracia en el país. Se trata de un tema especialmente sensible, dado que el año 2025 marcará el 50 aniversario de estos importantes eventos. En el discurso original, se hacía mención explícita al papel positivo de la monarquía en este proceso de transformación, lo que ahora queda bajo una sombra de controversia por la omisión de dicha crítica.

Fuentes cercanas a la Casa Real justifican esta eliminación argumentando que se trataba de un borrador que fue sometido a revisiones por motivos de extensión y adecuación. 'El único discurso válido es el que fue pronunciado', afirmaron, subrayando que el documento inicial tenía un carácter meramente provisional. A pesar de esto, ciertos círculos del Gobierno han comentado que había intenciones de presentar este guiño hacia el reconocimiento de la dictadura como un 'gesto demócrata' del rey, aunque quedó sin efecto.

No es la primera vez que el rey se refiere de manera crítica al franquismo; en su discurso de 2017, lo describió como un periodo 'de odio y rencor'. Sin embargo, la decisión de omitir esta crítica en un momento tan significativo ha generado especulaciones sobre la postura actual del monarca ante la memoria histórica de España.

Esta controversia se da en un contexto más amplio, donde el Gobierno ha programado una serie de eventos para conmemorar los 50 años de democracia en España desde la muerte del dictador Francisco Franco en 1975. La falta de mención en el discurso del rey ha sido vista por algunos como una falta de valentía política en abordar los oscuros capítulos del pasado. Sin duda, este acontecimiento generará un intenso debate sobre la relación entre la monarquía, la dictadura y la memoria histórica en el país.