El Partido Popular (PP), liderado por Alberto Núñez Feijóo, ha anunciado su decisión de no participar en los actos conmemorativos por el 50 aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco, programados para 2025. La secretaria general del partido, Cuca Gamarra, argumentó que estos actos son parte de una "estrategia cortoplacista" del presidente Pedro Sánchez para "tapar sus vergüenzas políticas" y los problemas que enfrenta su gobierno.

El portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, fue aún más contundente, cuestionando la razón detrás de la conmemoración del 8 de enero como un evento para recordar esta fecha. "Franco murió en la cama un 20 de noviembre de 1975. No sé qué se celebra el 8 de enero del 2025. Supongo que la flebitis que padecía el dictador", ironizó Tellado durante una rueda de prensa.

Tellado criticó que el gobierno se encuentra en una posición "desesperada" y atribuyó la necesidad del PSOE de revivir la figura de Franco como un recurso para desviar la atención de los problemas actuales. Recordó que Pedro Sánchez tiene a su esposa bajo investigación y que su hermano ha sido citado como imputado en un caso judicial en Badajoz. Además, mencionó que el Congreso deberá aprobar un suplicatorio en enero para que el Tribunal Supremo pueda investigar al exministro socialista José Luis Ábalos.

"A Pedro Sánchez le preocupa más su situación judicial que cualquier acto conmemorativo. Necesita hasta cien eventos para intentar ocultar la degradación judicial que afecta a su propio gobierno", continuó Tellado, insistiendo en la contradicción entre las promesas del PSOE de combatir la corrupción y los escándalos que han surgido desde el inicio de su mandato.

El portavoz del PP subrayó que no jugarán el juego del Gobierno al tratar de reactivar el debate sobre Franco y enfatizó que ellos prefieren celebrar la Constitución, que trajo la democracia a España, cada 6 de diciembre. "La Constitución la conmemoramos los demócratas, los que juramos cumplir y hacer cumplir. Parece que esa promesa no fue en vano para Sánchez", concluyó Tellado.

En el contexto actual de España, en el que el debate sobre la memoria histórica sigue siendo un tema candente, la decisión del PP posiblemente intensificará las tensiones políticas en el país. Muchos ciudadanos ya se preguntan si el Gobierno realmente intenta convertir a Franco en protagonista de la política contemporánea, desviando el foco de los escándalos judiciales que amenazan la estabilidad de su administración.