Un Encuentro Espiritual en Semana Santa

En un conmovedor acto de devoción, el Papa Francisco llegó hoy a la icónica Basílica de Santa María la Mayor para orar ante el venerado icono de la Virgen, Salus Populi Romani. Este momento, que se realizó en la víspera del Domingo de Ramos y de la Semana Santa, marca su visita número 126 a esta imagen mariana, una tradición que refleja el profundo vínculo del Pontífice con la fe cristiana.

Un Legado de Fe y Esperanza

La relación del Papa con la Salus Populi Romani es muy especial y ha perdurado desde su elección en 2013. Apenas hace tres semanas, tras su salida del Hospital Gemelli, el Pontífice se detuvo en la plaza de la basílica para rendir homenaje a la Virgen, entregando un ramo de flores amarillas que una devota, la señora Carmela Mancuso, había enviado como muestra de agradecimiento.

Tradición de Cuidado y Tendencia Espiritual

Desde el inicio de su pontificado, Francisco ha mantenido la costumbre de visitar a la Virgen antes y después de cada viaje apostólico. Este acto no solo consagra su fe, sino que simboliza el inicio de nuevas etapas en su vida, como su reciente proceso de convalecencia, reflejando su compromiso a la comunidad católica en todas sus travesías.

Recordando Visitas Pasadas

La última visita importante que realizó a la basílica fue el 14 de diciembre de 2024, durante su 47º viaje apostólico a Ajaccio, Córcega, donde ofreció sus oraciones por la comunidad y la conclusión del Congreso 'La Religiosité Populaire en Méditerranée'. Este gesto de oración y cercanía continúa inspirando a millones en todo el mundo.

Una Llama de Esperanza en el Corazón de Roma

Así, el Papa Francisco no solo reafirma su vinculación espiritual con la Virgen, sino que también ofrece un mensaje de esperanza y renovación en tiempos desafiantes, recordando que la fe y la comunidad están siempre entrelazadas.