Ciencia

¡El icónico kiosco meteorológico de Cangas necesita ayuda urgente! Antonio Iglesias hace un llamado al Concello

2024-10-02

El llamado a la acción por Antonio Iglesias

Uno de los símbolos más reconocibles de Cangas, el reloj de predicción meteorológica, está sufriendo serios daños por el paso del tiempo y la falta de mantenimiento. Este emblemático reloj, situado en la Alameda de Félix Soage, comenzó a oxidarse, lo que llevó a Antonio Iglesias Castro, un soldador que formó parte del equipo original hace 30 años, a expresar su preocupación.

"Cada vez que paso por delante, siento una profunda tristeza", confiesa Iglesias, quien lamenta que el Concello no disponga de presupuesto para su reparación. "Este reloj no solo es un punto de referencia para Cangas, sino un símbolo de nuestra historia y cultura gallega que merece ser preservado".

Historia y significado del reloj

Inaugurado en 1991, la construcción de esta réplica fue llevada a cabo por Iglesias junto a Avelino Avilés, ya fallecido, y Emilio Padín. Según Iglesias, la base del reloj presenta un alarmante nivel de óxido que podría poner en riesgo su estabilidad si no se actúa de inmediato. Además, la veleta del anemómetro ha dejado de funcionar, evidenciando así el descuido sufrido por esta pieza de patrimonio local.

Cabe recordar que el reloj de Cangas es único en Galicia; otras ciudades como Vigo o A Coruña no cuentan con un artefacto similar, lo que resalta aún más su importancia cultural. Este kiosco no solo ha sido un punto de encuentro para los habitantes de Cangas, sino que también ha sido testigo de momentos cruciales en la historia local.

La historia del reloj desde sus inicios

La historia de este reloj se remonta a 1908, cuando se instaló la pieza original, hecha de zinc, gracias a la iniciativa del ayudante militar de Marina Álvaro Guitián y financiada por los marineros para su propio beneficio. Este kiosco se creó tras varios naufragios trágicos en la zona, buscando ayudar a los marineros a conocer las condiciones meteorológicas antes de salir al mar. La pieza original desapareció sin dejar rastro, y no fue hasta los años 90 que se decidió construir una réplica.

Antonio Iglesias enfatiza que la historia del reloj y su singularidad en Galicia hacen que sea imperativo cuidar y preservar este monumento histórico: "Es un acto de respeto hacia nuestra cultura y nuestro pasado".

Restauraciones y futuro incierto

En 2019, el Concello, bajo la dirección del ya fallecido alcalde Xosé Manuel Pazos Varela, llevó a cabo una restauración del reloj después de muchas solicitudes por parte de los vecinos. Sin embargo, el deterioro actual plantea nuevas preguntas sobre su futuro. Muchos se preguntan qué medidas se pueden tomar antes de que sea demasiado tarde y este símbolo de Cangas sea irreparablemente dañado. ¡La comunidad debe unirse para salvarlo antes de que desaparezca para siempre!