Finanzas

El Ibex Bajo Presión: ¿Cómo la Devaluación de las Divisas Emergentes Amenaza a Brasil, México y Turquía?

2024-09-20

La devaluación de las monedas emergentes en 2024 está causando preocupación entre las grandes empresas del Ibex35. Entre enero y octubre, el peso argentino ha sufrido una caída del 15,6% frente al dólar estadounidense, el real brasileño ha perdido un 14,2%, el peso mexicano cede un 13,8% y la lira turca un 12,9%. Según los datos proporcionados por Bloomberg, estos países son fundamentales para muchos gigantes del Ibex como Santander, BBVA, Telefónica e Iberdrola, que dependen en gran medida de estos mercados, generando más del 20% de sus ingresos de allí.

According to Itsaso Apezteguia, analista de Ebury, mientras que algunas divisas latinoamericanas tuvieron un mejor rendimiento en 2023 gracias a los altos tipos de interés reales y al aumento de los precios de las materias primas, la situación ha cambiado drásticamente este año. El peso mexicano, argentino y el real brasileño se encuentran ahora entre las divisas de peor rendimiento.

Los analistas atribuyen esta devaluación al exceso de valor que algunas monedas alcanzaron el año pasado, sumado a la creciente incertidumbre política en estos países. También se destaca que el retraso en los recortes de tipos de interés en Europa y Estados Unidos ha fortalecido al dólar norteamericano y al euro a expensas de las monedas emergentes.

Además, las operaciones de carry trade, donde los inversores obtienen financiación en divisas con tipos de interés bajos para invertir en otras con mayores rendimientos, han contribuido a la caída. Este tipo de operaciones había tenido un auge en 2023, pero ahora se están deshaciendo, lo que agrava el problema.

Un efecto directo de la depreciación de estas monedas es que las empresas españolas que operan en estos países ven reducido sus márgenes de beneficio, ya que la conversión a euros les resulta menos favorable. Curiosamente, para las empresas exportadoras, la devaluación puede tener un efecto positivo, ya que sus productos resultan más competitivos y, por lo tanto, podrían incrementar las ventas en el extranjero.

La principal exposición de las empresas del Ibex a economías emergentes se encuentra en Brasil, donde el Santander obtiene el 30% de sus ingresos, lo que representa casi 7.000 millones en el primer semestre de 2024. Telefónica, por su parte, genera el 24% de sus ingresos en el país (alrededor de 5.000 millones) y otras empresas como Iberdrola y Mapfre también tienen intereses significativos en la región.

México también juega un papel crucial, especialmente para el BBVA, que es el banco más grande del país y genera el 45% de sus ingresos, cerca de 8.000 millones en el primer trimestre. Santander, con el 14% de su cifra de negocio en México (unos 3.200 millones), y otras empresas continúan mirando hacia este mercado como un motor importante de su negocio.

Hasta hace poco, el peso mexicano había sido considerado una divisa fuerte, alcanzando el estatus de 'superpeso'. Sin embargo, la situación política y la incertidumbre sobre las próximas elecciones han afectado su rendimiento. Las expectativas de que Donald Trump pueda volver al poder también han llevado a muchos analistas a ver el peso como una moneda débil y riesgosa.

Asimismo, las últimas decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos para recortar tipos podrían impactar aún más a las divisas emergentes al apreciarse el euro frente al dólar, exacerbando la debilidad de estas monedas.

En Turquía, BBVA se encuentra en una posición destacada con el 86% de Garanti, el segundo banco más grande del país. A pesar de haber registrado ingresos significativos (cerca de 2.000 millones en los primeros seis meses del año), la alta inflación en Turquía ha llevado a la entidad a adoptar medidas de contabilidad por hiperinflación, lo que afecta su rentabilidad. Sin embargo, tanto el presidente de BBVA como su CEO creen que la inversión en el país tiene un gran potencial a largo plazo, dada la perspectiva de crecimiento y revalorización de la lira.

En conclusión, el futuro del Ibex y de las empresas que operan en mercados emergentes parece incierto, pero no faltan quienes confían en la capacidad de adaptación de estas compañías para navegar por estas turbulentas aguas económicas.