La reciente tragedia causada por las lluvias torrenciales en la Comunidad Valenciana ha generado un enfrentamiento político entre la Generalitat Valenciana y el Gobierno de Pedro Sánchez. Durante días, el Partido Popular, liderado por Alberto Núñez Feijóo, criticó la tardanza del Gobierno en solicitar el Fondo de Solidaridad europeo. Sin embargo, la realidad ha sorprendido a muchos: el Ministerio de Hacienda ha solicitado la asombrosa suma de 4.404 millones de euros, mientras que la Generalitat solo reclamó 1.357 millones, lo que representa un tercio de la cantidad total solicitada por el Gobierno. Esto ha llevado a cuestionar la gestión de la Generalitat en relación con la magnitud de los daños sufridos.

La solicitud de fondos europeos es un proceso complejo que requiere una documentación exhaustiva de los gastos. El Ministerio de Hacienda había anunciado su intención de solicitar ayuda poco después de que se produjeran las devastadoras lluvias, pero lamentablemente, agotó el plazo para compilar toda la información necesaria. En contraste, la Generalitat presentó su solicitud un mes después del desastre, el 5 de diciembre, cuando muchos pueblos afectados aún luchan por recuperarse de la catástrofe.

La ayuda del Fondo de Solidaridad está destinada a áreas concretas como la restauración de infraestructuras básicas, costos de servicios de urgencia, seguridad de las infraestructuras, protección del patrimonio cultural y operaciones de limpieza. Mientras tanto, la Generalitat ha expresado continuamente su descontento con la falta de apoyo del Gobierno central, a pesar de seguir adjudicando obras de emergencia.

El descontento de la portavoz del Consell, Susana Camarero, se hizo evidente al criticar la "opacidad" en la gestión de los recursos solicitados. Afirmó que no tiene información sobre cómo se van a utilizar los más de 4.400 millones reclamados, lo que genera dudas sobre la transparencia del proceso. Sin embargo, las expectativas para el Fondo de Solidaridad se ven limitadas, ya que cuenta únicamente con 1.500 millones de euros y Hacienda ha advertido que no se podrá cubrir la totalidad de la cantidad reclamada.

En medio de esta crisis, el pleno del Consell ha tomado medidas para aumentar el número de contratos temporales para hacer frente a la situación emergente provocada por la dana del 29 de octubre. El presidente valenciano, Carlos Mazón, destacó sus esfuerzos por reducir la "grasa" administrativa, pero la necesidad de respuesta rápida ha llevado a la reestructuración del Gobierno, permitiendo la contratación de diez asesores adicionales. Aunque Mazón sostiene que siguen operando por debajo de los niveles del anterior Consell, se han mencionado ahorros significativos, estimados en 2,3 millones de euros anuales en personal eventual.

No cabe duda de que la situación sigue siendo precaria y que la lucha por los fondos necesarios para la reconstrucción apenas comienza. Mientras tanto, ¿cómo se garantizará que estos fondos sean utilizados correctamente para beneficiar a quienes más lo necesitan en estos momentos críticos?