Manifestación en Bilbao

EH Bildu ha llevado a cabo hoy en Bilbao una importante manifestación respaldada por todos los partidos independentistas catalanes. En un llamado a los jueces y al Gobierno vasco, han exigido que se "abran las puertas de las celdas" para los aproximadamente 80 presos de ETA que actualmente cumplen sus penas en régimen ordinario. Arnaldo Otegi, líder de la izquierda abertzale, ha estado acompañado de destacados dirigentes de Junts, ERC y la CUP, así como del ex presidente de Cataluña, Quim Torra. Juntos han participado en la marcha organizada por la plataforma Sare, que ha recorrido las calles del centro de Bilbao.

Reivindicación de derechos

La plataforma Sare ha sido clave en la reivindicación de los derechos de estos presos desde hace una década. Tras su éxito en 2023, que permitió el acercamiento de 150 etarras a Euskadi, la presión se intensifica para que los 77 que permanecen en régimen ordinario sean liberados pronto. El lema de la manifestación, 'Behin betiko' (Definitivamente, en euskera), simboliza esta lucha, a la que se ha sumado un numeroso grupo de independentistas catalanes, reforzando la solidaridad entre ambos movimientos.

Divergencia en estrategias

Sin embargo, este fuerte respaldo catalán contrasta con la distancia que mantienen los partidos vascos como el PNV y Podemos, que ya no participan en actos organizados por Sare. Esta situación plantea una divergencia en las estrategias, ya que muchos en Euskadi han expresado reservas respecto a la agenda de EH Bildu y su enfoque hacia la liberación de los etarras.

Revisión de condenas

La manifestación ha reunido a miles de simpatizantes abertzales, quienes han exigido a la Audiencia Nacional que avance en la revisión de condenas para casi una cincuentena de etarras que fueron condenados previamente en Francia. El grupo liderado por Joseba Azkarraga sostiene que estos 52 etarras podrían beneficiarse de una reciente reforma legislativa, aprobada por la mayoría progresista que sostiene al gobierno de Pedro Sánchez.

Críticas al Gobierno vasco

Los organizadores de la marcha han afirmado con rotundidad que "los presos y presas vascos han dado más pasos hacia la paz desde el año 2011 que toda la política y justicia española juntas". Su solicitud incluye que la concesión de beneficios penitenciarios no dependa de un supuesto arrepentimiento o colaboración con la justicia, especialmente considerando que quedan aún 370 asesinatos de ETA sin resolver.

Posición de Covite

Por su parte, el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) ha alzado la voz contra la concesión de "terceros grados fraudulentos" por parte del Gobierno vasco desde que asumió el control de las cárceles vascas. El Ejecutivo de Iñigo Urkullu ha sido criticado por facilitar la aplicación del artículo 100.2 del régimen penitenciario, permitiendo que más de 60 etarras salgan a realizar actividades sociolaborales durante el cumplimiento de sus condenas, una medida que suscita gran controversia en la sociedad vasca.