Salud

¡Descubrimiento Revolucionario! La Fibrosis en Tumores de Mama HER-2 Negativo Aumenta el Riesgo de Complicaciones

2024-10-06

Autor: Laura

La Unidad de Investigación Clínica de Cáncer de Mama del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) ha revelado, por primera vez en un estudio clínico, la alarmante conexión entre la fibrosis en tumores de mama HER-2 negativo y un pronóstico adverso. Este importante hallazgo, que ha sido publicado en la prestigiosa revista Clinical Cancer Research, representa un avance significativo en la lucha contra el cáncer de mama, y sugiere posibilidades de nuevas terapias basadas en fármacos antifibróticos, como el nintedanib, que actualmente se utiliza en el tratamiento de la fibrosis pulmonar idiopática.

El cáncer de mama HER-2 negativo es el tipo más común de esta enfermedad y se distingue por una baja presencia de la proteína HER2, un marcador del crecimiento tumoral. Aunque todos los tumores HER-2 negativo comparten esta característica, pueden tener diferentes evoluciones en cada paciente, complicando así la decisión sobre el tratamiento adecuado. Este estudio, liderado por el investigador Miguel Ángel Quintela, subraya la necesidad de evaluar la rigidez de la matriz extracelular, el tejido que sostiene a las células tumorales, cuyo endurecimiento no solo contribuye al desarrollo de fibrosis, sino que también favorece la diseminación de las células malignas.

El equipo del CNIO implementó una innovadora prueba llamada MeCo Score, que analiza la actividad de cerca de mil genes asociados a la fibrosis en tejidos tumorales de pacientes con cáncer de mama HER-2 negativo en etapas iniciales. Los resultados indicaron que una mayor presencia de fibrosis está fuertemente relacionada con un peor pronóstico del cáncer, elevando el riesgo de recaídas y metástasis.

El nintedanib, un fármaco antifibrótico, ha mostrado potencial al combinarse con quimioterapia, lo que podría traducirse en una acción terapéutica efectiva en pacientes con tumores altamente fibróticos. Esta combinación no solo ayudaría a los pacientes a manejar mejor su enfermedad, sino también a extender su esperanza de vida.

Cabe mencionar que en 2014, Quintela y su equipo ya realizaron un ensayo clínico con este fármaco en aproximadamente 130 pacientes de cáncer de mama. Ahora, gracias a la colaboración con el grupo de Gus Mouneimne de la Universidad de Arizona, se han revisado las muestras de aquellas pacientes, confirmando que aquellas con niveles más altos de fibrosis experimentaron mayores beneficios del tratamiento experimental.

Este avance tiene importantes repercusiones para la oncología. "Por primera vez en un estudio clínico se confirma el rol de la fibrosis como un factor pronóstico negativo extremadamente adverso", señala Quintela, quien enfatiza que este hallazgo abre puertas hacia tratamientos más personalizados y accesibles. A largo plazo, estos descubrimientos podrían llevar a la aprobación del MeCo Score por la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), aunque es necesario obtener más datos clínicos para validar esta herramienta.

Así, esta investigación marca un hito en el campo del cáncer de mama, ofreciendo nuevas esperanzas para mejorar no solo los tratamientos, sino también la calidad de vida de las pacientes que enfrentan esta dura batalla.