Ciencia

¡Descubrimiento asombroso! K2-18b: el exoplaneta que podría albergar vida

2025-04-19

Autor: Carmen

K2-18b: Un mundo oceánico en busca de vida

Imagina un planeta donde el aroma del océano se mezcla con la posibilidad de vida. K2-18b es eso y más. Con un tamaño equivalente a 2,6 tierras y una masa 8,6 veces mayor, este exoplaneta no solo es enorme, sino que además tiene una atmósfera bien definida y se encuentra en la temida 'zona habitable' de su estrella, un área que permite la existencia de agua líquida.

Los científicos han debatido durante años si K2-18b es un 'planeta hicéano', poético término que describe un mundo cubierto de océanos con una atmósfera rica en hidrógeno. Aunque podría no albergar vida compleja, tal vez existe vida microbiana, similar a aquella que pobló los océanos primitivos de la Tierra hace eones.

El prometedor hallazgo de biofirmas

Recientemente, un grupo de astrónomos británicos y estadounidenses publicó un artículo en 'The Astrophysical Journal Letters', revelando un descubrimiento impactante. Han encontrado, por primera vez, señales que podrían ser consideradas 'biofirmas' en K2-18b, acercándonos más a la posibilidad de hallar vida extraterrestre.

"Francamente, creo que esto es lo más cerca que hemos estado de identificar características atribuibles a la vida", afirmó Nikku Madhusudhan, autor principal del estudio. Sin embargo, permanecen cautelosos y resaltan la necesidad de más observaciones para corroborar estos hallazgos.

Tecnología de vanguardia en acción

Los avances en este campo son gracias al poderoso telescopio espacial James Webb, uno de los pocos instrumentos que puede analizar la atmósfera de exoplanetas distantes. Madhusudhan y su equipo detectaron dos compuestos químicos, el sulfuro de dimetilo (DMS) y el disulfuro de dimetilo (DMDS), que son indicadores de vida. Ambos compuestos emiten un olor similar al de la coliflor cocida y están presentes en el fitoplancton marino en la Tierra.

¿Una señal de vida? Los científicos se mantienen cautelosos

Los resultados recientes revelan que las concentraciones de DMS en K2-18b son miles de veces mayores que las de nuestro planeta. Aunque esto sugiere un posible origen biológico, Madhusudhan advierte que aún se necesita más investigación para confirmar la existencia de vida.

El futuro de la exploración espacial

Carlos Briones, científico del CSIC, recuerda que K2-18b ha sido objeto de estudio desde 2019, cuando se descubrió vapor de agua en su atmósfera. La comunidad científica se muestra optimista sobre la posibilidad de nuevos hallazgos en el futuro. Madhusudhan estima que entre 16 y 24 horas más de observación podrían ser determinantes en los próximos años.

"Este podría ser un punto de inflexión donde la pregunta de si estamos solos en el universo se convierta en algo que podamos responder", concluye con esperanza.