Recientemente, una usuaria de Vodafone, identificada como @amibola19, expresó su frustración en las redes sociales después de una conversación infructuosa con el servicio de atención al cliente de la operadora. La cliente informó que estaba experimentando problemas con su conexión a Internet y criticó la solución propuesta por Vodafone, que consistía en gastar dinero en dispositivos como amplificadores o repetidores WiFi para mejorar la cobertura en su hogar.

@amibola19 expresó su indignación de manera pública: "Si la solución es que el problema es de mis dispositivos (¿todos?) y me obligan a contratar otro servicio, el lunes iré a la oficina de consumo". Su reacción es comprensible, dado el impacto que los problemas de conexión pueden tener en la vida diaria, especialmente con el aumento del teletrabajo y las clases en línea.

¿Por qué puede fallar el WiFi?

Vodafone respondió a la usuaria indicando que había verificado el estado de la red en su hogar y que las señales eran normales. El técnico le explicó que, aunque la señal de la red estaba activa, los dispositivos en su hogar estaban experimentando una cobertura WiFi baja, lo que podría explicar las interrupciones.

Las debilidades del WiFi son diversas y pueden incluir factores como la disposición y los materiales de construcción de la vivienda (por ejemplo, paredes gruesas o distancias considerables entre el router y los dispositivos), así como la interferencia de otras redes cercanas. No obstante, muchos usuarios no son conscientes de estas variables, lo que puede llevar a malentendidos y frustraciones con su operadora de Internet.

Vodafone detalló que: "El problema no son tus dispositivos. Ten en cuenta que según la red a la que te conectas (2.4Ghz o 5Ghz) y el número de dispositivos conectados, la velocidad y la señal pueden variar". Si esperas una conexión estable y rápida, la única garantía es conectarte directamente a través de un cable Ethernet.

La conexión por cable: la mejor solución

Es fundamental recordar que, aunque es legítimo exigir respuestas a tu operadora ante un mal servicio, el WiFi tiene limitaciones inherentes. La conexión por cable proporciona una experiencia mucho más fiable, especialmente para actividades que requieren un alto consumo de datos, como la transmisión de video en alta definición o los videojuegos en línea. Por ello, es recomendable colocar el router cerca de dispositivos como ordenadores de sobremesa o consolas de videojuegos.

La conversación en redes sociales se intensificó, con otros usuarios coincidiendo en que la velocidad de un cable es siempre superior a la del WiFi, especialmente si te alejas del router. Incluso se sugirió que, si después de alejarte 10 metros la conexión falla, podría ser necesario reiniciar el router o cambiarlo si los problemas persisten.

Conclusión: No te dejes engañar por el WiFi

Es esencial entender que el WiFi no es infalible y que los problemas de conexión pueden estar relacionados con múltiples factores que escapan al control de la operadora. Antes de culpar a tu proveedor de servicios, asegúrate de conocer bien tu entorno y las limitaciones del WiFi. Así te ahorrarás frustraciones y podrás disfrutar de una conexión más fluida.