
¡Cuidado! Lo que no expresas puede enfermarte: cómo la desregulación emocional daña tu salud
2025-09-02
Autor: María
La conexión entre emociones y salud
¿Sabías que tanto sentir intensamente como reprimir tus emociones puede ser perjudicial para tu salud? La desregulación emocional, un fenómeno que impacta directo en nuestro bienestar físico y mental, tiene consecuencias como insomnio, contracturas, problemas digestivos e incluso caída del cabello. Recientes investigaciones resaltan que el área del cerebro encargada de manejar nuestras emociones también juega un papel crucial en la inflamación del cuerpo.
¿Qué es la desregulación emocional?
Esta desregulación ocurre cuando nuestras emociones no están bajo control, llevándonos a una constante sensación de intranquilidad. Natalia Seijo, directora de NS Centro de Psicoterapia, afirma que esto puede manifestarse en irritabilidad, dificultades para dormir y una mayor vulnerabilidad física. Si esta situación persiste, la salud de nuestro cuerpo empieza a resentirse.
Inflamación y salud física
Estudios científicos demuestran que, al no regular nuestras emociones adecuadamente, contribuimos a un estado inflamatorio en el cuerpo. ¡Atención! Esta inflamación podría ser la culpable de tu malestar general.
La somatización: cuando tus emociones hablan a través de tu cuerpo
La somatización es un fenómeno donde las emociones no expresadas se transforman en síntomas físicos. Natalia aclara que identificar si un síntoma es médico o psicosomático puede ser complicado. Si los exámenes médicos no muestran alteraciones, pero experimentas dolor, podría ser una señal de que tu cuerpo está reflejando tu estado emocional.
Defensas psicológicas y cómo te afectan
Según Seijo, somatizar es un proceso natural. Nuestro cuerpo se convierte en un espejo de cómo interactuamos con nuestro entorno, alertándonos cuando estamos fuera de equilibrio. Las somatizaciones comunes incluyen caída del cabello, problemas de la piel y dolores musculares.
El impacto de la crianza en nuestra salud emocional
La forma en que aprendemos a gestionar nuestras emociones se ensambla en gran medida a través de nuestra crianza. La validación emocional recibida en la infancia, como el reconocimiento de que es normal sentirse triste, nos ayuda a aceptar nuestras emociones sin autocrítica, protegiéndonos de posibles angustias físicas.
Conclusión: la importancia de la salud emocional
La sesión psicoterapéutica puede ser clave para ayudarte a identificar y procesar defensas emocionales. Trabajar en tu salud emocional no solo te permitirá entender mejor tus reacciones, sino que también contribuirá a mejorar tu bienestar físico y emocional, reduciendo la tendencia a la somatización.