"En esta época del año, notamos un aumento significativo en la asistencia a consultas psicológicas. Many people grapple with intense emotions during the holidays, and, sorprendentemente, no siempre es por razones positivas. La psicóloga Selene Martínez, autora de una guía gratuita online, quiere ofrecer herramientas a quienes se sienten abrumados durante esta temporada festiva.

Estas fiestas a menudo generan nostalgia y tristeza, exacerbadas por el recuerdo de sillas vacías en reuniones familiares. Sin embargo, la Navidad no solo conlleva nostalgia, sino también frustración, estrés y tensiones interpersonales, lo que la convierte en un periodo difícil para muchos. "Aunque se ha comenzado a hablar más sobre las dificultades que algunas personas enfrentan durante la Navidad, todavía hay quienes sienten que esta época no es motivo de celebración", reflexiona Martínez.

La psicóloga destaca que la presión social de ser feliz durante las festividades puede resultar agobiante. La frase 'Feliz Navidad' puede sentirse pesada para quienes están atravesando momentos difíciles. “Muchas veces nos encontramos en situaciones donde se espera que estemos contentos, pero no siempre es así. Esto puede aumentar la ansiedad en lugar de disminuirla”, añade.

El dolor de la ausencia

En Navidad, los duelos se vuelven un tema recurrente en las consultas. La psicóloga aconseja que, en lugar de evitar el tema, es vital honrar y hablar sobre aquellos que ya no están. “Es fundamental permitirnos sentir lo que tenemos que sentir, sin miedo al juicio de los demás”, declara Martínez. También resalta la importancia de crear un espacio de respeto en la mesa, donde se pueda recordar a esos seres queridos sin temor a causar incomodidad.

Los momentos de silencio compartido son importantes; pueden servir como una forma de rendir homenaje a la memoria de quienes han fallecido. Sin embargo, la mayoría de las personas se siente incómoda ante estos silencios, lo cual nos lleva a la necesidad de aprender a gestionarlos. "No hay que temer al llanto de los demás; es parte del proceso de duelo", enfatiza.

Conflictos familiares y tensiones

Las reuniones familiares pueden ser desafiantes. A menudo nos vemos obligados a enfrentar a familiares que suscitan conflictos o que tienen un comportamiento provocador. En lugar de evitar conflictos, se aconseja encontrar un equilibrio y establecer límites. “Si no puedes evitar ver a una persona conflictiva, establece un límite de tiempo para tu visita, de modo que la situación no se vuelva insostenible,” aconseja Martínez.

Introducir temas neutrales en las conversaciones puede ser una sutil manera de desviar las tensiones. Además, tener un aliado en la reunión puede ser crucial para evitar conflictos innecesarios y crear un ambiente más relajado.

Reflexiones sobre el año que termina

El final de año invita a reflexionar sobre lo logrado y lo no cumplido, y esto puede ser motivo de frustración. “La autoexigencia suele provocar que muchas personas se sientan decepcionadas con su propio desempeño,” explica Martínez. Para evitar esto, es fundamental establecer metas realistas y flexibles para el próximo año.

La libertad de crear nuevas tradiciones

Además, Martínez aboga por la importancia de normalizar la idea de no celebrar si uno no se siente listo, y crear nuevas tradiciones. “Es esencial escuchar nuestras necesidades y priorizar lo que nos hace sentir bien,” concluye. Alienta a las personas a crear sus propias tradiciones, permitiéndose días de descanso sin la presión de cumplir con expectativas. La Navidad no tiene que ser un torbellino de emociones si elegimos vivirla a nuestra manera.