Canarias en Alerta: Nueva Medida para la Crisis Migratoria

Desde mañana, Canarias entrará en estado de contingencia migratoria en un esfuerzo por abordar la creciente crisis de menores migrantes no acompañados. Esta medida proviene del Real Decreto 743/2025, que permitirá el traslado de estos menores a la Península, activando así un protocolo que busca mitigar el hacinamiento.

Números Reveladores: La Capacidad de Acogida en España

El gobierno ha determinado que la capacidad ordinaria de acogimiento se fija en 32,6 plazas por cada 100,000 habitantes en todo el país. Las comunidades con mayor capacidad incluyen Andalucía (2,827 plazas), Cataluña (2,650) y la Comunidad de Madrid (2,325). Sin embargo, la situación en Canarias es alarmante, con unos 5,200 menores actualmente en las islas.

Exigencias Urgentes del Presidente del Gobierno Canario

Fernando Clavijo, presidente de Canarias, ha exigido que se triplique la capacidad de acogida para facilitar la distribución de estos menores. En sus declaraciones, subrayó que "ya no hay excusas" para no actuar y afirmó su confianza en que la Fiscalía intervendrá de forma automática si se ignoran las directrices establecidas.

La Fiscalia en el Punto de Mira: Actuaciones Legales en Puerta

El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha resaltado la importancia de la "absoluta transparencia" en los criterios de reparto y ha advertido sobre posibles "consecuencias legales" para las comunidades que se nieguen a colaborar. Bajo este nuevo marco, se busca una respuesta solidaria hacia las regiones más afectadas por la migración.

Oposición en la Comunidad de Madrid: Un Nuevo Recurso Legal

La Comunidad de Madrid ha manifestado su desacuerdo con esta decisión y ha anunciado un tercer recurso legal. Esta vez, se trata de un contencioso administrativo que se llevará ante el Tribunal Supremo, argumentando que el decreto invade competencias locales y pone en riesgo los derechos de los menores.

Un Llamado a la Solidaridad y Dignidad

Esta crisis no solo requiere de acciones inmediatas, sino también de un sentido común y una respuesta humanitaria ante la situación de miles de niños. Con el futuro de estos menores en juego, es esencial que todas las comunidades colaboren para garantizar su bienestar y protección.