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¡Crisis en los puertos de EE.UU.! Por qué los estibadores están en huelga y qué significa esto para el comercio

2024-10-01

(CNN) Casi 50,000 miembros de la Asociación Internacional de Estibadores (ILA) han iniciado una huelga masiva que afecta a los puertos de la costa este y del golfo de EE.UU., interrumpiendo gravemente el flujo de importaciones y exportaciones. Este paro laboral plantea serios problemas para la economía del país y podría ser la huelga más disruptiva de las últimas décadas.

La huelga, que comenzó a la medianoche, afecta a los puertos de carga desde Maine hasta Texas. Esto implica que productos esenciales como plátanos, cerveza europea, vino, licores, muebles, ropa y piezas necesarias para que las fábricas estadounidenses continúen operando, entre otros bienes, están en riesgo de escasez. Por otro lado, las exportaciones estadounidenses también se verán perjudicadas, lo que afectará las ventas de las empresas locales.

La tensión entre el sindicato y la Alianza Marítima de EE.UU. (USMX) ha crecido, con importantes discrepancias sobre las demandas de los trabajadores. Harold Daggett, presidente de la ILA, declaró: "USMX provocó esta huelga al no compensar adecuadamente a los estibadores que hacen posible su riqueza". El sindicato exige aumentos salariales y mejores protecciones contra la automatización que podría amenazar los empleos.

Dependiendo de cuánto dure la huelga, podríamos ver escasez de bienes de consumo e industriales, desencadenando un aumento de precios que podría impactar negativamente a una economía que apenas comienza a recuperarse de las interrupciones ocasionadas por la pandemia.

Puertos críticos como el de Nueva York y Nueva Jersey, el tercero más grande de EE.UU. por volumen de carga gestionada, están entre los más afectados. El puerto de Wilmington, conocido por ser el principal acceso a los plátanos del país, manejaba 1.2 millones de toneladas métricas antes de la huelga, lo que representa una cuarta parte de la fruta consumida en EE.UU.

La buena noticia es que la mayoría de las compras navideñas podrían no verse tan afectadas como se pensaba. Aproximadamente el 70% de los bienes que los minoristas planean para la temporada ya estaban en camino antes de que estallara la huelga. Sin embargo, los perecederos como frutas y verduras podrían escasear pronto, lo que significa que los consumidores podrían notar precios más altos en las tiendas de comestibles en los próximos días.

La situación es complicada, dando lugar a preocupaciones por parte de más de 200 grupos empresariales que han instado al gobierno a intervenir. La Cámara de Comercio de EE.UU. ha solicitado al presidente Biden que use la Ley Taft-Hartley para mantener los puertos en funcionamiento, pero Biden ha rechazado esta opción, defendiendo el proceso de negociación colectiva.

Además, el presidente ha instruido a su equipo para que trabaje con ambas partes en la mesa de negociación, instando a llegar a un acuerdo lo antes posible. Sin embargo, el impacto real de una intervención puede ser cuestionable, ya que algunos analistas advierten que los trabajadores podrían ralentizar deliberadamente el movimiento de carga incluso bajo presión.

Esta situación, que es la primera huelga de este tipo desde 1977, ha puesto a ambos lados en una encrucijada. Si no se llega a un acuerdo pronto, las implicaciones serán graves no solo para la industria marítima, sino también para la economía estadounidense en general.