El Real Madrid ha convocado a sus ojeadores para la reunión anual en la ciudad deportiva de Valdebebas, un evento clave que reúne a cazatalentos de todo el país. Sin embargo, este año ha estado marcado por la tragedia de la DANA, que ha afectado gravemente a la comunidad valenciana y ha provocado la notable ausencia de algunos scouts, incluyendo a Xavier Moncholí, uno de los jefes de zona más importantes del club, cuyo hogar ha sido devastado por las inundaciones.

La reunión, organizada por el director de captación, Andrés Pardo, tiene como objetivo no solo discutir estrategias de fichajes, sino también fortalecer la relación entre los ojeadores que, durante un fin de semana, compartirán comidas y actividades tras un año de trabajo. Sin embargo, la decisión de llevar a cabo el evento no estuvo exenta de controversia; inicialmente se consideró cancelarla debido a la situación crítica en Valencia, donde muchos scouts han enfrentado pérdidas materiales significativas.

A pesar de estas dificultades, el club ha decidido seguir adelante, con el compromiso de analizar a los futuros talentos. La presión sobre los ojeadores es palpable, ya que se les exige no dejar escapar ninguna oportunidad de talento joven en su proceso de captación. Este año, la estrategia será más agresiva, abordando a los mejores futbolistas de las categorías inferiores antes que ningún otro equipo.

Entre las quejas expresadas por los ojeadores se encuentra la falta de atención que reciben sus informes sobre prospectos. Muchos consideran que jugadores prometedores ni siquiera están en la mira del club, lo que ha generado un sentimiento de frustración. Además, están pidiendo que se les brinde más autonomía en su trabajo, evitando reuniones innecesarias y viajes poco estratégicos que ralentizan su misión de encontrar nuevos talentos.

Durante estos días, la actividad en Valdebebas no se limitará a las reuniones. Se ha hecho un esfuerzo por concentrar la mayor cantidad de partidos de la cantera en un solo lugar, permitiendo a los ojeadores observar el desempeño de los jóvenes talentos en un periodo de tiempo reducido. A pesar de los retos logísticos, se ha contado con la colaboración de la RFFM y otros clubes para facilitar que estos partidos se celebren en la sede del Real Madrid.

Al final, la reunión anual no solo refleja la búsqueda de futuros talentos para el club, sino que también es un escenario para la solidaridad en tiempos difíciles, donde el sufrimiento de algunos se entrelaza con el compromiso inquebrantable de seguir escalando hacia la grandeza. La DANA puede haber dejado huellas, pero el espíritu de lucha del Real Madrid es indomable.