Introducción

La situación del lobo ibérico se ha convertido en un tema candente no solo en España, sino en toda Europa. Con el aumento de las poblaciones y los daños que causa a la ganadería, la presión para cambiar su estatus de protección se intensifica. El pasado 3 de diciembre, casi 50 países acordaron rebajar la protección del lobo bajo el Convenio de Berna. A partir de marzo, la Unión Europea comenzará a trabajar en cambios legislativos para otorgar a los países una mayor libertad en la gestión de esta especie. Sin embargo, la última palabra recae en cada estado, y hasta ahora el Gobierno español ha indicado que tomará decisiones solo si los datos muestran una tendencia favorable.

Perspectivas Políticas

Alicia García, portavoz del Partido Popular en el Senado, ha instado al Gobierno a actuar: "El Gobierno debe escuchar a los ganaderos y seguir las recomendaciones de Europa". Presentó una moción que fue aprobada para iniciar de manera urgente los trámites para excluir a las poblaciones de lobo al norte del Duero del listado de especies protegidas, permitiendo así una gestión local de la especie que ha causado estragos en la ganadería.

Declaraciones de los Partidos

La senadora del PSOE, Concepción Andreu, a su vez, afirmó que la regulación debe modificarse si el censo demuestra la necesidad, aunque actualmente se permiten extracciones en casos excepcionales. La preocupación es palpable entre las comunidades afectadas, ya que consejeros de Castilla y León, Galicia, Cantabria y La Rioja han expresado la necesidad urgente de descatalogar al lobo debido a su proliferación, que ha pasado de 297 manadas a 333 solo en Castilla y León, un aumento del 12% en toda España.

Reacciones Regionales

"No podemos simplemente mirar hacia otro lado mientras nuestros ganaderos sufren", indicó Juan Carlos Suárez-Quiñones, consejero de Medio Ambiente de Castilla y León. Las comunidades presentarán formalmente su petición de descatalogación con datos y argumentos científicos.

Situación Crítica en Galicia

En Galicia, la consejera María Ángeles Vázquez indicó que la situación ha llegado a un punto crítico, con una población de lobos cercana al millar distribuidos en el 91% del territorio. "Cuando una especie está en máxima protección, las comunidades no pueden actuar", reclamó Vázquez, señalando que es necesario devolver el control sobre la gestión de la especie a las autonomías.

Crecimiento de Manadas

Las cifras hablan por sí mismas: en Cantabria, el número de manadas ha crecido de 12 a 23 en una década. La consejera María Jesús Susinos advirtió que los daños se han vuelto insostenibles y se espera que el ministerio apruebe informes para permitir extracciones. La situación es aún más alarmante en La Rioja, donde el número de municipios afectados por ataques ha crecido un 40% entre 2005 y 2020.

Opiniones Divididas

Además, la opinión de Suárez-Quiñones es clara: el blindaje total del lobo no ha funcionado, citando el caso de Portugal, donde la población ha disminuido un 8% a pesar de la protección completa. Este hecho contrasta con los desafíos actuales de la ganadería en España, donde muchos sienten que estas políticas amenazan no solo su economía, sino también la vida rural.

Demandas de los Ganaderos

Los ganaderos, ya al borde de la desesperación, exigen un cambio inmediato que les permita proteger sus animales y medios de vida. La pregunta que todos se hacen es: ¿será este el inicio de un cambio real en la gestión de la fauna ibérica o solo una ilusión más en una larga batalla por el equilibrio entre conservación y producción?