Entiende el Colesterol: Un Desafío Común

El colesterol, un término que escuchamos frecuentemente, se ha convertido en un término temido en el ámbito de la salud. Sin embargo, pocos comprenden su verdadero papel en nuestro organismo.

La nutricionista Esther Montoliu destaca que tener colesterol elevado no siempre implica un peligro inminente. "El colesterol, en sí mismo, no es malo; es esencial para procesos vitales como la producción de hormonas y la vitamina D. Lo crítico es cómo se transporta y se acumula en el cuerpo."

Los Dos Caras del Colesterol: LDL y HDL

El colesterol se desplaza en nuestra sangre en forma de lipoproteínas, las cuales pueden ser de dos tipos: - **LDL**: Conocido como colesterol ‘malo’. Cuando está elevado y no se lleva un estilo de vida saludable, puede taponar las arterias, riesgo de enfermedad cardiovascular a largo plazo. - **HDL**: Considerado el colesterol ‘bueno’, es esencial para limpiar el exceso de colesterol de la sangre, llevándolo al hígado para su eliminación. Pero cuidado, niveles altos de HDL no siempre son sinónimo de salud.

¿Cómo Controlar el Colesterol? ¡La Dieta Es Clave!

Para mantener los niveles de colesterol equilibrados, es vital prestar atención a la dieta y realizar ejercicio regularmente. Montoliu aconseja no solo incluir alimentos beneficiosos, sino también evitar aquellos que incrementan los niveles de colesterol, como: - Ultraprocesados - Fritos - Azúcares en exceso - Embutidos

¡Aquí los alimentos que deberías incluir en tu dieta!:

- **Frutos secos**: Plenos de grasas saludables que ayudan a reducir el LDL. - **Avena y legumbres**: Ricas en fibra soluble, ayudan a atrapar el colesterol en el intestino. - **Aceite de oliva virgen extra**: Un magnifico aliado antioxidante que mejora el perfil lipídico. - **Pescados azules**: Salmón y sardinas son ricos en omega-3, que reducen triglicéridos e inflamación. - **Frutas y verduras ricas en pectina**: Como manzanas y cítricos, fundamentales para combatir el colesterol.

¡El Ejercicio es Esencial!

No subestimes el poder del ejercicio. Montoliu señala que realizar actividad física regularmente, como caminar, nadar o andar en bicicleta, puede elevar el HDL y disminuir tanto el LDL como los triglicéridos. Además, el ejercicio mejora la resistencia a la insulina y ayuda a controlar el peso, reduciendo el riesgo cardiovascular.

Mantener un colesterol saludable es un juego de estrategia: elige sabiamente tus alimentos, mantente activo y consulta a un profesional para personalizar tu plan. ¡Tu salud te lo agradecerá!