La tristeza y el shock invaden el mundo del fútbol ecuatoriano tras la trágica noticia del fallecimiento de Mathías Acuña, un delantero uruguayo de 32 años que recientemente había regresado al club Mushuc Runa. El cuerpo del futbolista fue hallado sin vida en un hotel de Ambato, y las autoridades están llevando a cabo investigaciones que apuntan a un aparente suicidio.

Mushuc Runa, conocido como El Ponchito, expresó su pesar a través de un conmovedor comunicado en sus redes sociales, en el que se extendieron las condolencias a la familia de Acuña: “Extendemos nuestra nota de pesar ante el sensible fallecimiento de Mathías Acuña. Paz en su tumba”. La noticia ha repercutido no solo en Ecuador, sino también en Uruguay, donde la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) emitió un mensaje de solidaridad.

Luis Chango, presidente del Mushuc Runa, detalló que Acuña se había presentado en el club apenas un día antes de su muerte, listo para reincorporarse a los entrenamientos de cara a la Copa Sudamericana 2025. “Como institución, daremos todo el apoyo para los trámites correspondientes en la repatriación del cadáver. Todos los que hacemos Mushuc Runa estamos consternados por esto”, señaló, dejando claro el impacto que este suceso ha tenido en el club y en el fútbol nacional.

Mathías Acuña, que había llegado a Ecuador desde el Lamia FC de Grecia, había sido una pieza clave en el equipo, contribuyendo a la clasificación a la Copa Sudamericana. A lo largo de su carrera, se destacó en equipos como Fénix de Montevideo, consolidándose como un delantero con experiencia tanto en su país como en el extranjero.

No obstante, su vida personal había estado marcada por controversias, incluida una situación legal reciente que atrajo la atención de los medios. En diciembre, Acuña reveló en sus redes sociales que la justicia uruguaya le había impuesto el uso de una tobillera electrónica en el marco de una investigación por presuntos maltratos hacia su ex pareja. Aunque él afirmaba tener la conciencia tranquila, este contexto sumaba un peso considerable a sus últimos meses de vida.

La ex pareja de Acuña, Lu Rodríguez, reveló en redes sociales el abuso físico que sufrió durante su relación. En sus publicaciones, destacó el miedo y la manipulación que enfrentó, y cómo la violencia fue escalando con el tiempo. Esta denuncia ha generado un amplio debate en las redes sociales, donde muchos claman por visibilizar la violencia de género y brindar apoyo a las víctimas.

La comunidad deportiva y los aficionados se encuentran en conmoción y luto, lamentando la pérdida de un talento que prometía seguir brillando en las canchas. La muerte de Mathías Acuña es un recordatorio doloroso de la complejidad de la vida personal de los deportistas y la importancia del apoyo y la salud mental en el ámbito deportivo.