Ciencia

¿Cómo abordar la devastadora DANA con tu hijo?

2024-11-01

Autor: Laura

La situación actual provocada por la devastadora DANA plantea un desafío importante para los padres: ¿deben hablar con sus hijos sobre lo que está sucediendo? La respuesta no es sencilla y varía según la edad, el carácter y la sensibilidad de cada niño. Aunque los expertos en psicología coinciden en que no se debe mentir a los menores, es vital tener cuidado al comunicarles estas realidades, especialmente si son más vulnerables.

Los conflictos mundiales, como la guerra en Ucrania o la situación en Palestina, han llevado a muchos niños a vivir momentos de angustia y ansiedad ante los peligros que ven reflejados en los medios. Este mismo tipo de preocupación puede surgir con la devastación causada por DANA, que ha cobrado la vida de más de 200 personas y arrasado comunidades enteras en regiones como Valencia y Cuenca. Niños en lugares lejanos como Barcelona o Badajoz pueden experimentar miedo a que un desastre similar les afecte. La diferencia crucial es que, mientras las guerras son eventos en teoría excepcionales, los desastres naturales son manifestaciones contundentes de la crisis climática que enfrentamos.

La ecoansiedad infantil es un fenómeno en aumento y todavía poco investigado. Silvia Collado, doctora en Psicología Ambiental y profesora en la Universidad de Zaragoza, describe esta ansiedad como un conjunto de sentimientos de malestar, nerviosismo y miedos relacionados con problemas ambientales. Para los niños de 7 a 9 años, estos sentimientos son especialmente intensos, y aunque pueden disiparse durante la adolescencia, pueden resurgir en la adultez.

Es aconsejable que los padres no oculten la información sobre la crisis climática y los desastres naturales, pero deben hacerlo con tacto. Collado sugiere evitar detalles catastróficos que provoquen pánico. La clave es reformular la información en términos más accesibles y alentadores. Por ejemplo, en lugar de hablar de una "catástrofe", se puede explicar que a veces ocurren eventos naturales que afectan a las personas, pero que hay formas de prevenir y ayudar a los demás.

Adaptar el lenguaje a la edad del niño es esencial al abordar los devastadores eventos de DANA. Save the Children resalta que cada etapa del desarrollo infantil requiere un enfoque distinto. Para los más pequeños, el uso de palabras simples es fundamental y evitar términos que disparen alarmas es prudente. Explicaciones claras y comprensibles, acompañadas de un enfoque empático, son imprescindibles.

Además, es importante validar los sentimientos de los niños. Los padres deben escucharles y confirmar que es normal sentir angustia o miedo. Fomentar la expresión emocional a través del dibujo puede ser una buena herramienta, y los padres deben mostrar que están presenten y dispuestos a apoyar con frases como “estoy aquí contigo”. Esto no solo les ayuda a procesar sus emociones, sino que también les enseña que es válido sentir y compartir lo que sienten.

La devastación que deja un desastre natural como DANA puede ser traumática para los más jóvenes, así que es esencial que los padres permanezcan alertas a los signos de angustia en sus hijos y se conviertan en una fuente de calma y comprensión en tiempos difíciles.