En su debut en el mercado, Inmocemento, la nueva filial de cemento e inmobiliaria de FCC, sufrió una caída del 10% y cerró en 3,83 euros. Este movimiento se enmarca dentro de la estrategia de Carlos Slim para hacerse con el control de Metrovacesa, una de las principales promotoras inmobiliarias de España.

Slim, reconocido empresario mexicano, está en una feroz competencia con otras figuras influyentes como Amancio Ortega, fundador de Inditex, y Warren Buffet, el gurú de las inversiones. Si las condiciones del mercado mejoran, no se descarta una fusión entre Inmocemento y sus otras participaciones importantes: Metrovacesa y Realia.

La estrategia de Slim podría cambiar el panorama inmobiliario español, ya que, con este movimiento, busca consolidar su posición en un sector muy competido. Inmocemento, separada de FCC, le brinda nuevas oportunidades para capitalizar el crecimiento en el área de la construcción y el desarrollo inmobiliario.

Carlos Slim ha demostrado su capacidad para adaptarse y crecer en mercados desafiantes, y muchos analistas observan con atención sus próximos pasos. La movida de listar Inmocemento en Bolsa es solo el primer paso en una ambiciosa estrategia que podría modificar la dinámica del sector en España. ¿Logrará Slim convertirse en el verdadero rey del ladrillo? La batalla está servida.