La segunda etapa del Rally Dakar 2025 ha sido un verdadero campo de batalla para los pilotos, y los españoles han tenido una jornada especialmente complicada. A las 5:20 hora española, Carlos Sainz, a sus 62 años, se lanzaba al desierto de Bisha al mando de su Ford Raptor T1+. Sin embargo, la mala suerte lo ha acompañado, pues en esta etapa ha quedado fuera del top 15 tras volcar su vehículo, lo que le costó cerca de una hora respecto al líder de la carrera.

Un inicio dramático

Al poco de comenzar, Sainz perdió tiempo valioso y no fue el único, ya que su compañero de equipo, Mattias Ekström, también enfrentó problemas mecánicos en el kilómetro 739, perdiendo casi 20 minutos con respecto a los punteros, entre ellos Al Rajhi y Nasser Al-Attiyah. En contraste, Nani Roma estuvo luchando al límite y logró cerrar la brecha, posicionándose a solo 10 minutos del líder. Sin embargo, su suerte también se agotó, ya que en el PK 766 sufrió un fallo mecánico que lo obligó a detenerse.

Despedida triste para Cristina Gutiérrez

La jornada trajo consigo la peor noticia para el equipo español: Cristina Gutiérrez, quien había hecho una primera etapa destacada dentro del top 10, se vio forzada a abandonar. A tan solo 200 kilómetros de concluir la etapa maratón, su Dacia Sandrider comenzó a presentar fallos que llevaron a la piloto a pedir asistencia técnica.

Lo más sorprendente es que días atrás, Gutiérrez había prestado su apoyo a Sebastien Loeb cuando él sufrió problemas mecánicos. Aun así, la falta de fiabilidad del Dacia le ha costado no solo su participación, sino que también la capacidad de terminar como "finisher" en este Dakar. Este abandono se suma a la triste salida de Laia Sanz, cuya racha de 14 Dakares consecutivos se rompió en el primer día debido a un vuelco.

Liderazgo en peligro

Con los dos españoles fuera de combate, la competencia se tornaba intensa. Al Rajhi se llevó la etapa maratón, aumentando su ventaja en la general a 4 minutos y 16 segundos sobre Henk Lategan, y 6 minutos y 29 segundos por encima de Nasser Al-Attiyah. Esta intensa y difícil jornada en el Dakar 2025 deja claro que la competencia es feroz, y los desafíos del desierto son implacables. Los aficionados esperan ansiosos ver cómo se desarrollan las siguientes etapas, ¿podrá un nuevo piloto español recuperar el terreno perdido? La emoción está asegurada en los próximos días.