Desastre Aéreo en Peinador

La situación se volvió insostenible en el aeropuerto de Peinador tras la inesperada cancelación del vuelo Vigo-Barcelona, operado por Vueling e Iberia. Unos 200 pasajeros se encontraron atrapados en la terminal, sin respuestas claras después de un fallo técnico que impidió la salida del Airbus A320, que tiene capacidad para 220 personas.

Expectativas Frustradas

Con el despegue inicialmente programado para las 16:00, los viajeros comenzaron a llegar desde las 14:00. Sin embargo, la suspensión del vuelo no fue confirmada hasta las 20:00, dejando a muchos sin saber qué hacer. Alrededor de las 20:30, todavía había personas formando una larga cola, esperando alguna solución.

Historias del Caos

Paula Fariñas, una de las pasajeras afectadas, relató su angustiante experiencia. Recibió un correo indicando que había sido reubicada en un vuelo de A Coruña a Barcelona programado para el jueves a las 23:50. "¿Qué hago mientras? ¿Me pagan el hotel y la comida?", cuestionaba con desesperación, tras varias horas de incertidumbre.

Compensaciones Insuficientes

Después de ser atendida, la aerolínea le proporcionó un taxi para pasar la noche en un hotel en Santiago, y al día siguiente otro taxi la llevará a A Coruña para tomar su nuevo vuelo. A otros pasajeros se les ofrecerá cubrir sus gastos de alojamiento hasta el 1 de septiembre.

Dificultades Adicionales

Paula también comentó las complicaciones que enfrentan otros pasajeros, incluyendo familias con niños y personas en sillas de ruedas. La compañía ofreció un ticket de seis euros para un refrigerio, pero ella no pudo aprovecharlo porque tuvo que ir a recuperar su equipaje. "Estamos completamente desamparados", añadió.

Exigencias de los Pasajeros

Entre la frustración general, muchos pasajeros han intentado contactar a la aerolínea para obtener reembolsos o cambios de vuelo, solo para toparse con un sistema telefónico que nunca responde y una página web que no funciona. En medio de este caos, la falta de apoyo y soluciones ha dejado a todos con una sensación de abandono.