Rubén Baraja no se esconde. En medio de una crisis alarmante en el Valencia CF, con solo 5 puntos de 21 posibles, el entrenador está contemplando un cambio radical en su estrategia, optando por un sistema 5-4-1. Pero eso no es todo, ya que la alineación podría ver caras nuevas como Yarek Gasiorowski, quien podría debutar como tercer central, y Sergi Canós, que asumiría el rol de carrilero derecho.

El clima en el equipo es tenso, y Baraja es plenamente consciente de ello. En sus declaraciones, manifestó: "Entiendo que se dude de mi capacidad, ya sea Rubén Baraja o cualquier otro nombre en mi lugar. Con estos resultados, es lógico cuestionar. Sin embargo, tengo una fe extrema en mí mismo y en este grupo de jugadores. Siento el apoyo del club y la situación se está manejando con naturalidad. Cuando se genera tanto debate o reuniones, es porque algo no va bien. Pero estoy respaldado al 100%. Confían en mi trabajo y eso me da una gran tranquilidad".

Esta es, sin duda, la peor crisis que ha enfrentado como entrenador del Valencia CF. En un discurso impactante en San Sebastián, llamó a sus jugadores a la autocrítica y posteriormente, mantuvo reuniones en el vestuario para abordar con claridad los problemas. "Quiero ver si el equipo reacciona tras lo que dije. Sentí mucha decepción por el resultado en San Sebastián. Los rivales pueden marcar goles, pero si sucede por fallos en los que llevamos trabajando, eso es frustrante. Y, que quede claro, el máximo responsable aquí soy yo", aseguró con determinación.

Si el Valencia no logra una victoria, podría entrar en la zona de descenso, con casi una cuarta parte de la temporada ya consumida. Ante esta posibilidad, Baraja insistió: "No soy de los que dramatizan. Sigo creyendo en el proceso. Esperábamos un comienzo difícil, aunque no anticipamos tener tan pocos puntos. Esto podía suceder y no debemos exagerar la situación. Mañana debemos enfocarnos en mejorar".

Con la presión a su alrededor, Baraja ha asumido la responsabilidad y espera que su mensaje resuene en el equipo, llevando al Valencia hacia un resurgimiento que todos sus seguidores anhelan.