El Gobierno de la Comunidad de Madrid, bajo el liderazgo de Isabel Díaz Ayuso, ha decidido implementar un nuevo marco legislativo que busca fortalecer la calidad educativa en las universidades. Esta iniciativa surge en respuesta a la controversia generada por la mujer del presidente Pedro Sánchez, quien fue criticada por desempeñar un cargo de codirectora en una cátedra a pesar de no poseer la titulación universitaria requerida. "No podemos permitir que esto empañe la imagen de nuestras instituciones educativas", afirmó Ayuso durante la inauguración del curso académico en Getafe.

La nueva Ley de Enseñanzas Superiores, Universidades y Ciencia (Lesuc), actualmente en fase de consulta, tiene como objetivo establecer regulaciones que restrinjan el acceso a cargos académicos a aquellos que no cumplan con las credenciales necesarias. Esto incluye la exigencia de que los candidatos a rector sean al menos profesores acreditados como catedráticos. "Es momento de recuperar el prestigio y la excelencia en nuestras universidades", subrayó la presidenta madrileña.

Además, esta normativa busca combatir el problema de la endogamia en el ámbito universitario y la inserción de individuos no calificados que no estén a la altura de los estándares de excelencia requeridos. Ayuso también declaró que todas las acreditaciones serán reconocidas y se fomentará la llegada de los mejores docentes e investigadores, sin importar su lugar de procedencia.

Uno de los retos más considerados por los rectores universitarios es la insuficiencia de fondos. La nueva ley propone un sistema de financiación plurianual que se revisará cada cinco años. Este modelo incluirá una financiación básica para el funcionamiento de las universidades, así como fondos adicionales para necesidades excepcionales y objetivos estratégicos, lo cual promete aumentar la competitividad y la calidad de la educación superior en Madrid.

El rector de la Universidad Carlos III de Madrid, Ángel Arias, apoyó esta fórmula de financiación, resaltando que "por cada euro invertido, las universidades generan cinco en retorno". Sin embargo, también expresó su preocupación por la falta de un compromiso claro en la legislación estatal. "La nueva ley es una oportunidad irrenunciable para atraer talento", afirmó Arias, instando a Ayuso a hacer realidad sus compromisos.

Durante el evento, que contó con la participación del destacado psiquiatra Luis Rojas-Marcos de la Universidad de Nueva York, Ayuso enfatizó su compromiso de consolidar a Madrid como el epicentro de la educación superior en España. Por primera vez, las escuelas de negocios tendrán regulaciones específicas bajo esta nueva ley. Además, busca fortalecer la conexión entre la universidad y la Formación Profesional, promoviendo la formación dual y colaboraciones con el sector empresarial.

Otro aspecto relevante de la legislación es el impulso del idioma español como lengua de enseñanza en las universidades y el aumento del presupuesto destinado a becas para estudiantes.

Sin embargo, los rectores expresaron su preocupación por la urgencia de la financiación, advirtiendo que no pueden esperar a que la nueva ley se implemente para asegurar los recursos financieros necesarios. "La falta de una financiación adecuada pone en riesgo la calidad de la educación que ofrecemos. Necesitamos claridad en el presupuesto de 2025", enfatizaron. La situación es crítica, y la comunidad universitaria espera que estas reformas se traduzcan en beneficiostangible pronto.