La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha lanzado fuertes críticas este jueves hacia el partido Más Madrid, en el marco del escándalo relacionado con Íñigo Errejón. Durante una intervención, al ser preguntada por Manuela Bergerot sobre las políticas de cambio climático, Ayuso no dudó en responder con ironía: “¿Me ha preguntado por el clima o por el clímax?”.

Ayuso continuó arremetiendo contra Más Madrid, insinuando que sus políticas fomentan el descontrol: “¿Van a beneficiar a Errejón con su ley del sí es sí? Cuando venía de otro partido llamado Unidas Podemos, ¿no se unían en torno al macho alfa para hacernos entrar en una lista? [...] ¿Llegaban solas y borrachas a casa después de salir con Errejón de noche?”. Afirmaciones que han generado un alto grado de controversia, cuya interpretación varía según el espectador.

La presidenta caracterizó las ideas de la izquierda como “siempre malas, nefastas y trampas”, añadiendo que en cada una de ellas han menospreciado la figura de la mujer y socavado el Estado de derecho. Este ataque provocó una escalada de debates en las redes sociales, donde la representación femenina y el machismo se convirtieron en protagonistas de la conversación.

En cuanto a las repercusiones del ‘caso Errejón’, se ha informado que este incidente ha debilitado notablemente la posición de Más Madrid. Fuentes internas del partido han admitido que enfrentan un panorama oscuro, y si se convocasen elecciones autonómicas o municipales en breve, podría desencadenarse una crisis irreparable. Dada la ausencia de elecciones hasta 2027, la formación confía en tener tiempo para resolver la crisis, aunque la oposición está decidida a mantener la presión.

El escándalo ha tenido como resultado la renuncia o destitución de figuras clave, como Loreto Arenillas, jefa de gabinete de Errejón, quien se encuentra sin un rumbo claro en su carrera política. Aunque Arenillas aún no ha dimitido, su futuro político pende de un hilo, con una posible expulsión o la opción de mantenerse como representante no adscrita, lo cual podría permitir al PSOE ganar terreno en la Asamblea.

Más Madrid está presionando a Arenillas para que tome una decisión rápida, advirtiendo que, de no actuar, se reavivará la presión sobre ella. Además, hay voces dentro del partido que sugieren que su expulsión no se considera una opción inmediata, pero que es esencial que asuma su responsabilidad y actúe.

Arenillas, por su parte, ha declarado que renunciar significaría aceptar una culpa que considera injusta; se ve a sí misma como un “chivo expiatorio”. En su comunicado, también reveló que tuvo conocimiento de un caso de agresión atribuido a Errejón en 2023, lo que añade un nuevo matiz a la compleja situación que atraviesa el partido.

La tensión en Más Madrid sigue creciendo y las proyecciones para el futuro político de sus miembros son inciertas. Este escándalo no solo afecta a Errejón, sino que podría tener implicaciones duraderas para la imagen del partido y su capacidad de atraer votantes en las próximas elecciones.